THE OBJECTIVE
Motor

Estas son las nuevas reglas de la Dirección General de Tráfico para 2025

Las novedades afectan en especial a los ciclistas y a los conductores que interactúan con ellos

Estas son las nuevas reglas de la Dirección General de Tráfico para 2025

Un ciclista recorre una carretera secundaria. | Carlos Castro (Europa Press)

Año nuevo, leyes nuevas. Puede que la Dirección General de Tráfico cierre en fines de semana y festivos, pero las carreteras que controla nunca lo hacen, y para este 2025 han cambiado unas cuantas regulaciones que necesitaban una actualización ante las nuevas necesidades. Y no son los únicos en revisar sus normativas para los que nos movemos sobre ruedas.

En unos días, la Dirección General de Tráfico que dirige Pere Navarro ofrecerá una rueda de prensa con los datos definitivos y detallados sobre las víctimas de tráfico del pasado 2024. Hasta el 17 de diciembre, la suma alcanzaba los 1.107 fallecidos, y se sospecha que la cifra se verá aumentada tras añadir lo que haya ocurrido en fechas navideñas.

Son 1.107 desgracias, pero el dato es, en la frialdad de las cifras, positivo si lo comparamos con las cinco veces más de hace unos años. La DGT trabaja poniendo nuevas regulaciones, y lo venidero indica por donde se conducen sus preocupaciones; una muy importante son los ciclistas. A la entidad reguladora del tránsito le preocupan estos usuarios y en su defensa va a modificar y añadir nuevas normativas relacionadas.

Es muy poco frecuente que los ciclistas protagonicen por sí mismos accidentes mortales. Casi todos ocurren cuando este tipo de vehículo interacciona con otros, y es a los ajenos a quien vigilará la DGT. En lo sucesivo, los conductores deberán reducir la velocidad en al menos 20 km/h por debajo del límite establecido al adelantar a bicicletas. Dicho de otro modo, en vías de 100 km/h deberán reducir hasta 80, o en las de 60 km/h, hasta 40.

En principio se mantiene la distancia lateral mínima de metro y medio al adelantarles, y el plan es que se eleven las sanciones para aquellos que no respeten esta norma. En vías con varios carriles por sentido, los conductores deberán abandonar el que usen —tal y como se hace en un adelantamiento a otro coche— para rebasar a ciclistas. Otra regla que se añade es que quedará prohibido todo adelantamiento cuando haya ciclistas circulando en sentido contrario en la misma vía.

Para los propios ciclistas también hay. En carretera, será obligatorio, y no opcional, el uso de casco y elementos reflectantes. Las únicas excepciones serán por motivos médicos suficientemente justificados. También deberán utilizar elementos reflectantes o luminosos que garanticen su visibilidad desde una distancia de ciento cincuenta metros, en especial cuando las condiciones sean de baja visibilidad.

En áreas urbanas y si no hay carril bici, los ciclistas deberán circular por la calzada, preferentemente por el centro —ni pegado a la izquierda ni a la derecha—. En vías estrechas, de sentido único y con velocidad limitada a 30 km/h, tendrán permitido circular en sentido contrario, una medida algo controvertida. También se permitirá a los ciclistas adelantar por ambos lados a aquellos vehículos que se encuentren detenidos en atascos.

La DGT no se olvida de las motocicletas en estas mismas circunstancias, y en lo sucesivo les será permitido circular por el arcén derecho en vías con retenciones. Podrán hacerlo siempre y cuando no superen los 30 km/h. Los rectores del ente quieren acentuar la vigilancia sobre las infracciones consideradas leves, como pasarse de forma deliberada semáforos en amarillo, pequeños excesos de velocidad en áreas urbanas, o respetar las distancias mínimas.

Algo que les preocupa mucho es el uso del teléfono móvil al volante, y para controlar esta circunstancia se dispondrá de nuevos radares inteligentes capaces de atender varias funciones. A la habitual de registrar la velocidad se une ahora el uso del cinturón de seguridad y la utilización de teléfonos o dispositivos durante la conducción. De paso, se van a prohibir los adelantamientos en autopistas y autovías cuando haya nieve o hielo en la superficie. En caso de retenciones o accidentes, los conductores deberán crear un pasillo central que facilite la circulación de vehículos de emergencia.

En Barcelona, más control a los patinetes

Al igual que otras grandes urbes, la Ciudad Condal tiene un problema con los desórdenes que provocan muchos usuarios de los Vehículos de Movilidad Personal (VMP) o dicho de otro modo, los patinetes eléctricos. El ayuntamiento va a modificar sus ordenanzas de circulación a partir de 1 de febrero. A partir de esa fecha, todo aquel patinetista que no lleve puesto un casco podrá recibir una multa de 100 euros. También habrá sanciones de no llevar luz delantera y trasera.

Los VMP son vehículos de uso unipersonal, y sería sancionable su uso con dos o más personas. La multa se elevará a 500 euros si se utilizan estos vehículos por la acera, zonas peatonales o por vías en las que la limitación exceda de 50 km/h. Los patinetes eléctricos deberán circular por carriles habilitados a un máximo de 25 km/h de velocidad, o bien a 10 km/h si dicho carril está situado sobre una acera o es un parque. La edad mínima de empleo se estipula en 16 años. Otras ciudades con esta misma problemática acabarán adoptando medidas similares.

Y guerra a las carreras ilegales, pero lejos

En la madrugada del 13 de enero de 2024, dos jóvenes de 18 y 21 años perdieron la vida durante la celebración de una carrera ilegal en un polígono industrial de Vitoria. Es uno de los muchos casos a los que se enfrentan las autoridades relacionadas con este tipo de actividad. Los jóvenes quieren emular a Vin Diesel en Fast & Furious, y al final ocurren estas cosas.

Las policías locales, que suelen ser las que aparecen cuando son avisados, llegan cuando ya ha ocurrido algún tipo de accidente y alguien les ha avisado. Este tipo de actividades son muy difíciles de controlar; se organizan a través de redes sociales, empiezan y acaban en minutos y es frecuente que terminen en accidentes, incluso con víctimas mortales.

En España no se está atacando con fuerza esta situación, pero en California, donde tienen el mismo problema, van a acometer con más diligencia el asunto. A partir de ahora no solo se sancionará a los conductores de los vehículos implicados, sino también a los espectadores.

A partir del 1 de julio de 2025 los patrulleros californianos estarán autorizados a incautar los coches que participen en los llamados sideshows —una especie de concurso de derrapadas y excesos al volante—. Los participantes en este tipo de exceso callejero pueden enfrentarse a una suspensión de su permiso de conducir de hasta seis meses. Esa es la sanción menor; la mayor puede suponer el pago fuertes multas o incluso penas de cárcel para aquellos que participen, ayuden o presencien este tipo de espectáculo.

Sanciones a los mirones

El mero hecho de asistir puede acarrear penas de hasta noventa días de encierro y una multa de quinientos dólares. El estado también tendrá derecho a suspender los carnets de conducir entre noventa días y seis meses si el detenido es culpable de participar en uno de estos eventos. Todas estas acciones punitivas incluyen la pérdida del vehículo si así lo estima oportuno un juez.

Si todas estas cosas han ocurrido hasta ahora es porque la sanción correspondiente era poca, se aplicaba con laxitud o sencillamente no se contemplaban penas. El gobernador demócrata Gavin Newsom ha declarado la guerra a las carreras ilegales, porque entiende que para hacer el cabra subido a un coche se construyeron los circuitos.

Estados Unidos es un lugar en el que el futuro tiende a ocurrir antes, así que no sería de extrañar que medidas similares acabasen llegando aquí. Con toda seguridad, en la DGT estarán tomando nota.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D