Pence recomienda a Corea del Norte que no ponga a prueba la determinación de Trump

El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, ha recomendado este lunes a Corea del Norte que no ponga a prueba la «determinación» del presidente estadounidense, Donald Trump, frente a los programas balísticos y nucleares de Pyongyang.

«Corea del Norte haría mejor en no poner a prueba su determinación, o la potencia de las fuerzas armadas de Estados Unidos desplegada en esta región», ha manifestado Pence en una rueda de prensa celebrada en Seúl donde se encuentra de visita oficial, añadiendo que Estados Unidos está «preocupado» por las medidas económicas adoptadas por China en respuesta al despliegue de un escudo antimisiles estadounidense en Corea del Sur.

Despliegue de China y Rusia

Mientras, China y Russia han desplegado buques espías ante la llegada barcos del ejército de EEUU a aguas próximas a norcoreanas, han informado medios japoneses, en medio de las tensiones originadas en torno a las acciones nucleares mostradas por el régimen de Pyongyang.

El gobierno chino pidió la semana pasada el apoyo de Rusia preocupado por que Donald Trump busque un enfrentamiento con Corea del Norte por su programa armamentístico.

El presidente de EEUU envió varios navíos encabezados por el portaaviones Carl Vinson a la región en lo que se ha interpretado como una advertencia a Pyongyang. Trump se refirió a esta fuerza como una «armada» y anunció el envío también de submarinos que a los que se refirió como “mucho más potentes que el portaaviones».

Our military is building and is rapidly becoming stronger than ever before. Frankly, we have no choice!

— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 16 de abril de 2017

El vicepresidente de EEUU ha subrayado que la «era de la paciencia estratégica se ha terminado» con Corea del Norte. Durante su visita a la Zona Desmilitarizada que separa las dos Coreas ha comentado que Trump espera que China utilice sus «extraordinarias» influencias para presionar al gobierno de Kim Jong-un a que abandone las armas.

Pence, que se refirió a la fallida prueba con misiles del día anterior como «una provocación«, ha asegurado que Estados Unidos y sus aliados lograrán sus objetivos «a través de medios pacíficos o en último recurso por cualquier otro medio que sea necesario» para proteger a Corea del Sur y la estabilidad en la región.