El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha convocado para este viernes una reunión urgente de la Comisión de seguimiento del plan de lucha contra los delitos de odio, tras la última agresión homófoba registrada en Madrid.
En contexto: cuando España todavía sigue conmocionada por la paliza mortal al joven Samuel en A Coruña, la Policía investiga una nueva agresión homófoba el pasado domingo a un joven de 20 años en Malasaña. La víctima fue atacada, según su testimonio, por ocho encapuchados que le cortaron un labio, le bajaron los pantalones y la ropa interior y le grabaron la palabra «maricón» en un glúteo con una navaja mientras proferían insultos de tintes homófobos.
En la rueda de prensa del Consejo de Ministros, la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha informado de que Sánchez presidirá la reunión con el objetivo de activar nuevos mecanismos para evitar este tipo de agresiones que merecen «el máximo reproche social y político».
Sánchez va a solicitar también al Congreso y a los grupos parlamentarios que aceleren al máximo la tramitación de la ley para la igualdad de trato y la no discriminación, la conocida como ley Zerolo.
Rodríguez ha asegurado que el Gobierno va a utilizar todas las herramientas del Estado de derecho para combatir actitudes y discursos que promueven el odio, desde el convencimiento de que toda persona tiene derecho a desarrollarse sin verse amenazado ni agredido por razones ideológicas, de raza o de orientación sexual.
Desde el Ejecutivo, dos ministras de Unidas Podemos han criticado al PP por desligar los hechos de «los discursos de odio» que promueve Vox, a raíz de que su portavoz y alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, haya considerado «excesivo» trazar esa conexión.
«Excesivo blanqueamiento, excesiva LGTBIfobia», ha tuiteado la responsable de Igualdad, Irene Montero, en tanto que la titular de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, ha lamentado el intento del PP de «quitarle hierro a los discursos de odio que la ultraderecha lanza a diario».
«No podemos callar ante los que no permiten vivir una vida segura a una parte de nuestro país. Frente a su odio, vidas libres», ha añadido Belarra.
