Todas las comunidades han empezado ya a inyectar la segunda dosis de la vacuna de Pfizer contra el coronavirus a internos y trabajadores de residencias y centros sociosanitarios, que adquirirán la inmunidad como mínimo dentro de una semana.
En contexto: el proceso de vacunación arrancó en nuestro país el pasado 27 de diciembre. El pasado domingo, 21 días después, comenzó la inyección de la segunda dosis. Este lunes hemos recibido una nueva remesa de 205.727 vacunas de Pfizer, un 44% menos que otras semanas debido al retraso en el suministro que la compañía anunció el pasado viernes.
En Castilla-La Mancha han recibido este lunes la segunda dosis del suero Araceli Hidalgo, la interna de la residencia de Los Olmos en Guadalajara que recibió la primera inyección en España, y Mónica Tapias, auxiliar de enfermería en este centro. Tanto Araceli como Mónica han querido animar a participar a toda la población a la que se dirige la vacunación, un paso «de gigante» para dejar atrás esta enfermedad.
Una imagen similar que se ha reproducido en otras comunidades como Cataluña, que, aunque comenzó el domingo con la inyección de la segunda dosis, hoy ha administrado la segunda a Josefa Pérez, una anciana de 89 años residente en Feixa Llarga, en L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), que fue la primera en vacunarse en esta comunidad.
No ha podido ser vacunada, sin embargo, la primera inoculada de la provincia de Tarragona al hallarse su planta de la residencia Mare de Déu de la Mercè en aislamiento preventivo por COVID-19, lo que desaconseja la inyección.
En Asturias, la usuaria de la Residencia La Mixta (Gijón), Eulalia Josefa Paleo, de 80 años, ha hecho un llamamiento a toda la ciudadanía para que se inmunice contra el virus como ha hecho ella: «Mientras esto no baje en la calle, nosotros no salimos», ha advertido la anciana, natural de Lugo y conocida como Pepita por sus amistades.
La residencia Somontano de Barbastro (Huesca) también ha inoculado esta mañana la segunda dosis a 35 residentes y 10 trabajadores; tras el segundo pinchazo, Lidia Navarro, de 84 años, y José Bruballa, de 86, se han mostrado esperanzados en recuperar la normalidad de la que disfrutaban antes.
«A ver si nos vacunamos pronto todo el mundo y tenemos la suerte de que esto se va atajando, porque cada día hay más infectados y no sé lo que va a pasar al final», ha asegurado la mujer, que ha asegurado añorar el poder abrazar a sus nietos pequeños, a los que no ve desde el inicio de la pandemia.
Vicente Mirón, de 72 años, y María Petra García, de 85 años, residentes del centro Rosalba de Mérida, también estarán inmunizados dentro de siete días; ambos han vuelto a animar a la ciudadanía a vacunarse. «Si uno o dos no se vacunan y se pasean por ahí, pues de nada sirve», ha dicho María.
Igualmente, los usuarios de la residencia de mayores de Vallecas (Madrid) han sido inmunizados este lunes: «Me siento muy cómodo», ha dicho Antonio Carballal, uno de los residentes en completar el ciclo de vacunación contra la covid-19, que ha animado a «todo el mundo» a que se vacune para «ver si matamos al bicho».
Mientras, el Departamento de Salud del Gobierno navarro ha comenzado a administrar la segunda dosis de la vacuna, cumpliendo así el calendario previsto pese a la demora de las entregas anunciadas por la farmacéutica; esta segunda ha arrancado en el centro El Vergel, que fue también el primero en el que se administró la primera dosis, el pasado 27 de diciembre.
En total España recibirá 4.591.275 dosis de la vacuna de Pfizer con las que se conseguirá inmunizar a 2.295.638 personas; además, también se está administrando la de Moderna, cuyas primeras dosis llegaron el pasado 12 enero y de la que le corresponden 599.500 en total.
