Mónica García, la activista que lideró las mareas blancas, sexta ministra de Sanidad de Sánchez
Ha desarrollado su carrera profesional como anestesista en el Hospital Universitario 12 de Octubre
Se confirman los rumores. Tal y como contó THE OBJECTIVE, Mónica García es la nueva ministra de Sanidad en sustitución de José Miñones, quien solo ha estado ocho meses en el cargo, cuatro en funciones.
De esta forma, García pasa a ser la sexta titular de Sanidad de Sánchez en cinco años, el Ejecutivo que ha sumado más ministros en esta cartera que carece de competencias al estar estas transferidas a las CCAA. En los últimos 45 años ha habido 26 ministros de Sanidad. Ni dos años de media. Mónica García es la número 27 de la democracia.
Mónica García (Madrid, 1974) es «médica y madre de tres hijos». Así se define en su cuenta de X (antiguo Twitter). Ha desarrollado su carrera profesional como anestesista en el Hospital Universitario 12 de Octubre y participó en las protestas de las mareas blancas en defensa de la sanidad pública como portavoz de la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (AFEM).
Hija de dos psiquiatras, pasó prácticamente desapercibida en su primera legislatura en la Asamblea de Madrid como diputada, cuando entonces militaba en las filas de Podemos. Sin embargo, afín a la corriente de Podemos liderada por Íñigo Errejón, en marzo de 2019 se integró en la lista de éste para las primarias de Más Madrid de cara a confeccionar la lista para las elecciones a la Asamblea de Madrid de 2019.
Mónica García, médica de trinchera
Su figura fue decisiva en las elecciones anticipadas de 2021, en las que Pablo Iglesias quiso liderar un frente de izquierdas contra Isabel Díaz Ayuso y García rechazó la propuesta porque aspiraba a ejercer su liderazgo sin imposiciones de un partido que había abandonado. «Las mujeres estamos cansadas de hacer el trabajo sucio para que en los momentos históricos nos pidan que nos apartemos», señalaba por entonces ante la propuesta de Iglesias, resumiendo en tres palabras la aportación de éste a la historia política: «frivolidad», «espectáculo» y «testosterona».
De esta forma, con un punto de agresividad contenida cuando habla, se ha ido abriendo paso poco a poco en política, después de haber hecho durante los dos últimos años oposición a Isabel Díaz Ayuso desde su escaño en Más Madrid, sobre todo en lo que afecta a cuestiones sanitarias. En mayo de 2023, volvió a ser candidata a la Presidencia de la Comunidad de Madrid en las elecciones autonómicas por la coalición electoral Más Madrid-Verdes Equo. Consiguió 27 escaños, consolidándose como alternativa a Ayuso y dando el sorpasso a PSOE en votos, 620.631 frente a los 614.296 de los socialistas.
Activista
No obstante, si por algo es conocida la ya ministra de Sanidad, que con 15 años comenzó a practicar atletismo, es por su papel como activista y portavoz durante las conocidas como ‘Mareas Blancas’ para denunciar los recortes y «precariedad» de la sanidad pública. Ella fue precisamente la que alentó la protesta entre los sindicatos cuando se amplió la jornada a los empleados públicos de 35 a 37,5 horas. También participó en los encierros, concentraciones y manifestaciones que se desarrollaron en 2012 y 2013 junto a sus compañeros de la Asociación de Facultativos Especialistas de Madrid (AFEM).
«Con la Marea Blanca conseguí frenar la privatización de la Sanidad y hacer caer a Lasquetty», dijo en el vídeo que publicó para anunciar su primera candidatura a la presidencia de la Comunidad de Madrid en mayo de 2021.
Polémicas de Mónica García
En los últimas meses, no solo ha copado titulares por ser posible titular de Sanidad, en abril, El Debate publicaba que un informe jurídico de la Comunidad de Madrid confirmaba que el chalet que García tiene en la colonia de Camorritos es irregular.
Según el medio, el Consejo Consultivo de la Comunidad de Madrid argumenta que el terreno es público y, por tanto, no sería legal prorrogar una nueva concesión al terreno. El Ayuntamiento de Cercedilla ya ha solicitado por escrito a Mónica García que entregue las llaves de la vivienda. Se trata de un chalet familiar del que es titular de una tercera parte en una urbanización heredado de sus padres. En el lugar se levantaron decenas de casas, pero la concesión terminó en abril de 2019 y ahora están ocupando las viviendas casas en terreno público a la espera de ver si se renueva la concesión.
En 2021, también protagonizaba una nueva polémica. El Mundo anunciaba que la por entonces diputada de Más Madrid tenía que devolver 13.000 euros por haber cobrado como parlamentaria con dedicación exclusiva mientras estaba de baja laboral. «La irregularidad fue detectada por la propia Cámara regional y la diputada aceptó un plan de pagos fraccionado que comenzó en enero. En el entorno de García, en cambio, indican que fue ella la que se percató del ‘error administrativo’ y solicitó la devolución de las cantidades cobradas indebidamente ‘de manera inmediata’», dice el texto.
Preocupación en la sanidad privada
El sector de la sanidad privada ya mostró su preocupación ante la posibilidad de que el Ministerio cayera en manos de Sumar. Y es que bien sabido es que el partido que encabeza Yolanda Díaz defiende una sanidad totalmente pública, algo que, según la patronal de la sanidad privada (ASPE), «supondría una temeridad injustificada y demuestra un grave desconocimiento de la realidad sanitaria del país».
«ASPE muestra su recelo a lo relativo a la excepcionalidad de uso de conciertos público-privados por numerosas razones. Por un lado, supondría un gasto de más de 2.700 millones cada año adicionales a la sanidad pública, teniendo en cuenta que la colaboración supone, como mínimo, un ahorro del 50% para las arcas públicas respecto a los precios con los que trabaja la sanidad pública», apuntan desde la patronal.
No obstante, desde Sumar hacen oídos sordos a estas advertencias y el pasado 15 de noviembre Yolanda Díaz volvía a cargar contra la sanidad privada. En su discurso durante la primera sesión del pleno de investidura de Pedro Sánchez amenazaba con subir el IVA a la sanidad privada. «Nosotros no compartimos que la sanidad privada y la educación privada tributen al 0% […]. Nos parece muy bien que la ciudadanía vaya a la sanidad privada y a la educación privada, pero esto no puede sufragarse con los impuestos de la gente», manifestaba.
El modelo Muface también está en riesgo con la llegada de Mónica Garcia a la cartera de Sanidad. Así lo confirman fuentes del sector a THE OBJECTIVE: «Muface no va a tener recorrido con Sumar. su programa deja my claro que todos los ciudadanos tienen que tener el mismo sistema sanitario publico sin privilegios de los funcionarios. El concierto está destinado a extinguirse», lamentan.
Los ministros que han pasado por uno de los ministerios más convulsos de los últimos años han sido Carmen Montón Giménez, quien estuvo en el cargo solo tres meses, ya que tuvo que dimitir tras ser acusada de irregularidades, incluido el plagio en su tesis final (7 de junio de 2018-11 de septiembre de 2018), María Luisa Carcedo (11 de septiembre de 2018-13 de enero de 2020), Salvador Illa, quien abandonó el Ministerio en plena crisis del coronavirus (13 de enero de 2020-27 de enero de 2021), Carolina Darias, que dejó la cartera de Sanidad para presentarse a la alcaldía de Las Palmas (27 de enero de 2021-28 marzo de 2023) y José Miñones (28 de marzo de 2023 – noviembre 2023)