España dispara la producción de cannabis medicinal: 60 veces más que en 2021
Sanidad inició en febrero los trámites para regular este producto como terapia para tratar algunas enfermedades
España sigue aumentado la producción de cannabis medicinal año tras año. Si en 2021 se notificó una previsión de producción de 600 kilos, en 2022 de 6.000 y en 2023 de 9.000, el pronóstico para este 2024 es que finalice el año con 36.000 kilos. De esta forma, España multiplicará por 60 la obtención de cannabis para fines de investigación o farmacológicos en solo tres años.
Son las últimas estimaciones de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), encargada de vigilar la aplicación de los tratados de fiscalización internacional de drogas, con previsiones de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps). De esta forma, en su Estado de las Previsiones 2024, actualizada el 4 de marzo de 2024, calcula que España producirá este año unas 36 toneladas de cannabis medicinal. Y es a principios de año el Ministerio ya arrancó la maquinaria para su legalización.
El pasado mes de febrero, el Ministerio de Sanidad comenzó el trámite para regular el cannabis medicinal en España. A falta de detallar la norma –que se encuentra en fase de diálogo–, el departamento de Mónica García sacó el 5 de marzo a consulta pública el real decreto que ampliará su utilización farmacológica, que hasta ahora se limita a dos medicamentos para la esclerosis y la epilepsia (Epidiolex y Sativex). Así, hasta el próximo 19 de este mes, la ciudadanía puede hacer aportaciones a través de un correo electrónico en la web del Ministerio.
Y es que la aprobación de esta medida se viene arrastrando desde hace tiempo, ya que el 27 de junio de 2022, con Carolina Darias como ministra de Sanidad, se celebró en el Congreso de los Diputados una subcomisión para el estudio de la regularización del cannabis con fines terapéuticos, que concluyó con un mandato a la Aemps para que elaborara un informe con un plazo de seis meses que no se han cumplido, ya que ha sido ahora, año y medio después, cuando se ha remitido este borrador al Ministerio.
España es a día de hoy el único país situado entre los mayores productores del mundo de cannabis con fines medicinales que no cuenta con un marco regulatorio de uso. Únicamente dispone de una ley de 1967, promulgada por Franco, para la concesión de las autorizaciones de cultivo que aprueba la Aemps.
España, séptima potencia mundial de cannabis medicinal
Hasta 2010, Estados Unidos era el único país que notificaba consumo lícito de cannabis para fines médicos y científicos. Sin embargo, desde 2011, un número cada vez mayor de países ha comenzado a utilizar la marihuana y sus extractos con fines médicos, así como para la investigación científica. España se encuentra este año entre los siete primeros del mundo que han notificado a la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes una mayor previsión de marihuana (en 2022 ocupaba la 12º posición).
Reino Unido es el país que más cannabis medicinal produce del mundo, su previsión para 2024 es de 406,1 toneladas; le sigue Canadá (284,6 toneladas), Colombia (100 toneladas), Israel (97,5) y Australia (97,2).
22 empresas autorizadas
En este sentido, y a pesar de que el texto está en fase muy preliminar, Sanidad sigue emitiendo licencias a empresas para el cultivo de cannabis. En concreto, según la última actualización hecha por la Aemps, con fecha del 27 de febrero de 2024, hay 22 empresas en España con autorización para cultivar plantas de cannabis: 15 tienen autorización para cultivar las plantas con fines de investigación, otras cinco pueden hacerlo para la producción y fabricación de cannabis y sus productos con fines médicos y científicos; y dos para la obtención de los lotes necesarios para la validación del proceso de fabricación de principios activos estupefacientes con fines médicos.
El número de empresas autorizadas para el cultivo de plantas de cannabis casi se ha triplicado en apenas cuatro años. Si en 2020 solo nueve tenían el visto bueno de la Aemps para ello, en 2022 ya aumentaron a 21 y, en 2023, a 22. La andaluza Phytoplant Research fue la primera en recibir una licencia de Sanidad para trabajar con el cannabis con fines de investigación en 2012.
No obstante, pese al aumento de licencias, producción y hectáreas, los expertos señalan que el 66% se destina a la exportación y solo un 25% se queda en España para la producción de los dos únicos medicamentos con componentes cannábicos autorizados en nuestro país (los mencionados Epidiolex y Sativex). El restante sería utilizado para proyectos de investigación que se llevan a cabo con la planta.