Si te duele la boca del estómago tienes epigastralgia y estas son sus causas
El dolor es tan intenso que lleva a las personas a acudir a urgencias, confundiéndolo con una afección más grave
Hombre con dolor de estómago | Canva
El dolor en la boca del estómago, conocido como epigastralgia, no es un malestar común. Esta condición se presenta como una molestia localizada en el epigastrio, la zona superior del abdomen, y puede ir acompañada de sensaciones como ardor, náuseas, calambres y gases.
En ocasiones, el dolor es tan intenso que lleva a las personas a acudir a urgencias, confundiéndolo con una afección más grave.
¿Qué es exactamente la epigastralgia?
La epigastralgia es el dolor localizado en el área situada entre el esternón y el ombligo, una zona que alberga varios órganos importantes como el estómago, el esófago y los intestinos.
Dado que muchos de estos órganos pueden estar involucrados, las causas del dolor pueden ser diversas, desde trastornos leves hasta enfermedades más serias. Los síntomas comunes incluyen:
- Dolor en el epigastrio.
- Náuseas y vómitos.
- Ardor estomacal.
- Calambres abdominales.
- Sudores fríos.
¿Con qué se suele confundir la epigastralgia?
La epigastralgia, o dolor en la boca del estómago, a menudo puede confundirse con otras afecciones relacionadas con el sistema digestivo o incluso con problemas más graves.
Un diagnóstico erróneo es común, ya que el dolor en la zona superior del abdomen puede asemejarse a molestias derivadas de una indigestión, gastritis, o úlceras gástricas.
Estas condiciones también provocan ardor, calambres y náuseas, síntomas que pueden ser fácilmente confundidos, especialmente cuando el dolor se presenta de forma intermitente o después de comer ciertos alimentos irritantes.
Sin embargo, el dolor epigástrico también puede ser un síntoma de afecciones más graves, como una pancreatitis, una apendicitis o problemas cardíacos, como un infarto.
En estos casos, el dolor no solo se limita al área del estómago, sino que puede irradiar hacia la espalda o el pecho y venir acompañado de otros síntomas, como vómitos o sudores fríos.
Por esta razón, siempre es recomendable que cualquier dolor en el epigastrio, sobre todo si es severo o persistente, se evalúe adecuadamente por un médico para descartar condiciones graves y obtener el tratamiento adecuado.
¿Qué causas tiene epigastralgia?
Este dolor, localizado en la zona superior del abdomen, puede deberse a una variedad de causas. Aunque las molestias pueden ser transitorias y relacionadas con la alimentación, en algunos casos, el dolor epigástrico puede ser indicativo de trastornos que requieren atención médica.
- Problemas en el esófago: la esofagitis, generalmente causada por reflujo gastroesofágico, y la hernia hiatal son condiciones comunes que pueden causar epigastralgia. Estas afecciones se caracterizan por dolor, acidez y dificultad para tragar.
- Trastornos gástricos: las úlceras gástricas y la gastritis aguda son dos de las causas más frecuentes de dolor en esta zona. La gastritis puede ser de origen infeccioso, tóxico o alimentario, y se acompaña a menudo de vómitos y malestar general.
- Enfermedades intestinales: el dolor epigástrico también puede estar relacionado con afecciones del intestino, como la apendicitis, la enfermedad de Crohn y el síndrome del colon irritable. En estos casos, el dolor puede ser difuso o presentar características cólicas.
- Problemas pancreáticos: la pancreatitis aguda, una inflamación del páncreas, puede comenzar con dolor en la región epigástrica, generalmente acompañado de vómitos y distensión abdominal.
- Problemas cardíacos: en casos raros, el dolor epigástrico puede ser un signo de un infarto de miocardio. Este dolor suele ser súbito y opresivo, y se acompaña de otros síntomas como dificultad para respirar y vómitos.
¿Qué prevención y tratamiento existe?
La epigastralgia es un síntoma de diversas condiciones médicas, y su tratamiento dependerá de la causa subyacente. Sin embargo, hay un factor común que puede ayudar a prevenir muchos de estos problemas: la dieta.
Mantener una alimentación saludable y evitar alimentos irritantes puede reducir el riesgo de sufrir afecciones como la gastritis o el reflujo gastroesofágico.
Si experimentas dolor intenso o recurrente en la zona superior del abdomen, es crucial consultar a un médico para obtener un diagnóstico adecuado y evitar complicaciones mayores. No subestimes el dolor, ya que puede ser un indicio de afecciones que requieren tratamiento médico especializado.
