¿Otro milagro del Ozempic? Podría ser eficaz contra el alcohol y el tabaco
Algunas personas que se han sometido al tratamiento aseguran haberse liberado de diversas adicciones
El Ozempic no pasa de moda. El medicamento, usado originalmente para tratar la diabetes tipo 2, ha revolucionado el mercado y cada vez son más los clientes que optan por esta opción para bajar de peso. Los expertos no parecen llegar a un acuerdo sobre si los tratamientos de este tipo son o no perjudiciales para la salud. Una de las principales preocupaciones tiene que ver con los efectos secundarios. La reciente incorporación al mercado (su uso para controlar el peso comenzó a ganar relevancia en 2021) hace que queden muchos frentes abiertos, y se espera que el estudio de esta sustancia se desarrolle en los próximos años.
Según ha señalado National Geographic, existe la posibilidad de que el Ozempic ayude a frenar adicciones de varios tipos. Aunque el objetivo inicial sea perder peso de manera drástica, hay personas que aseguran haber perdido el mono de beber alcohol, fumar, o incluso ingerir drogas recreativas mientras se sometían al tratamiento.
Varios estudios defienden esta teoría. En una investigación realizada en mayo de 2024 por Nature Communications en la que se hizo un seguimiento de 83.825 personas con obesidad, concluyeron que más del 50% de las que tomaban Ozempic corrían un menor riesgo de tener problemas con el alcohol. Los que se decantaban por otros medicamentos, como naltrexona o topiramato, no tenían el mismo efecto secundario.
No está aprobado por las autoridades sanitarias con este fin
THE OBJECTIVE se ha puesto en contacto con un farmacéutico para conocer su opinión sobre estos estudios. «Es un tema bastante complicado. Al final, lo que hace este tratamiento es decirle al centro del apetito que estás saciado, y el apetito está estrechamente ligado a la vía del placer, que es la dopaminérgica. Enfocándolo de esa forma, sí puedo llegar a entender que inhiba una parte de ese sistema de recompensa, aunque no se conozca el mecanismo de acción».
«A mí no me lo han comentado los clientes. Los que necesitan realmente Ozempic son personas con diabetes a las que el médico ya les ha quitado del tabaco y del alcohol hace tiempo, por lo que la teoría es bastante complicada».
Preguntado por la posibilidad de que Ozempic ayude a frenar la adicción a la nicotina, el experto, que en cuanto al alcohol pueda llegar a entender la idea, cree que con la nicotina la teoría pierde fuerza. «Aunque la nicotina entre en la vía dopaminérgica de recompensa, tenemos receptores de nicotina y de opioides. Por tanto, aunque en el caso del alcohol pueda llegar a comprenderlo, con la dopamina, no».
Hay personas que optan por someterse a este tratamiento con el fin de dejar sus adicciones, lo cual implica un elevado riesgo. El uso de Ozempic como mecanismo para frenar la adicción al alcohol o al tabaco no ha sido aprobado por las autoridades sanitarias.
¿Una vía rápida para «vagos»?
Si hay algo en lo que concuerdan la mayoría de especialistas es que Ozempic no puede ser un sustitutivo de un estilo de vida saludable y activo. Hay quienes lo contemplan como un complemento para aquellas personas que se enfrentan a un desafío muy complicado, pero en ningún caso debe reemplazar la dieta o el ejercicio.
Llamar vago a alguien que tiene obesidad perpetúa el estigma asociado con esta condición, que la propia OMS califica como enfermedad. Sin embargo, según el farmacéutico consultado, hay quienes solicitan someterse a este tratamiento para perder un par de kilos. «En los casos de obesidad mórbida, en los que la persona ni quiere ni puede bajar de peso, puede ser una opción muy útil», señala. Sin embargo, a pesar de que el tratamiento pueda ser eficaz y se experimente una pérdida de peso significativa, si no hay un estilo de vida saludable y equilibrado lo más probable es que vuelva a recuperar el peso en poco tiempo.
En todo caso, se trata de un tratamiento reciente y hacen falta años de investigación y observación para determinar si sus efectos son buenos como o si realmente puede perjudicar la salud.