Temor a un repunte del virus del Nilo tras una primavera lluviosa y la llegada abrupta del calor
En 2024, 151 personas se contagiaron y 20 fallecieron por esta enfermedad trasmitida por la picadura de mosquitos

Activación del protocolo de prevención y control del Virus del Nilo (Sevilla). | Europa Press
Las comunidades autónomas están redoblando sus esfuerzos este año ante el temor a un repunte del virus del Nilo Occidental (VNO) como consecuencia de una primavera más lluviosa de lo normal y una llegada abrupta del calor. Los expertos aseguran que el riesgo vuelve a ser muy alto este año. Por ello trabajan desde marzo en medidas de prevención, en un intento de evitar errores del pasado. En el verano de 2024, 151 personas se contagiaron, de las cuales 20 fallecieron por esta enfermedad trasmitida por la picadura de mosquitos del género Culex, según datos del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (Ccaes). Hasta entonces, el brote más grave había tenido lugar en 2020, cuando el Ministerio de Sanidad contabilizó 77 pacientes (57 en Sevilla, 14 en Cádiz y seis en Badajoz) y ocho muertes.
Así lo explica a THE OBJECTIVE Rafael Toledo, catedrático de Parasitología de la Universidad de Valencia, que apunta que este año hay una serie de «riesgos añadidos»: «Hemos pasado por épocas muy lluviosas que incrementan esos remansos de agua; además, hemos experimentado un cambio abrupto a temperaturas muy altas, lo que hace que se incrementen mucho las poblaciones de mosquitos y, por tanto, se incremente el riesgo de transmisión», apunta el experto, que hace hincapié en que el hombre, al igual que el caballo, es un hospedador accidental, es decir, no transmite el virus. El VNO se transmite entre las aves –sobre todo gorriones– a través de la picadura de mosquitos infectados, siendo este su ciclo natural.
En 2025, los científicos ya han capturado entre 9.000 y 10.000 hembras en la zona occidental de Andalucía, donde más prolifera este mosquito, una cantidad aún alejada de las 192.000 del año anterior, sin que se haya detectado el virus del Nilo. Sin embargo, Jordi Figuerola, investigador de la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC), señala en este medio que ahora que llega el calor, lo que se espera es que en las próximas semanas «las poblaciones vayan en aumento». Además, este año en los arrozales de la provincia de Sevilla –uno de los principales focos de proliferación de la zona– está previsto que se siembren 36.500 hectáreas, una cifra muy superior a las 25.000 del año pasado. En 2023, un año de sequía, no se pudo cultivar arroz y apenas hubo mosquitos.
Virus del Nilo: prevención temprana
Figuerola subraya que los programas de control, tanto por diputaciones –sobre todo la de Sevilla– como por los municipios más afectados, ya comenzaron hace meses, aprendiendo de los errores cometidos en el pasado. Además, desde la Estación Biológica de Doñana también iniciaron sus trabajos en marzo: «La vigilancia ya está en marcha. Nosotros comenzamos a trabajar en marzo en la estación de Doñana y en mayo se incorporaron los muestreos que hacemos junto a la Diputación de Sevilla. De momento todo lo que se ha analizado ha salido negativo».
La revisión más reciente de la situación epidemiológica en España indica que se han producido casos en humanos y animales en Andalucía, Extremadura, Castilla-La Mancha, Cataluña, Valencia y Castilla y León (Ccaes 2025). Un estudio reciente también confirmó la presencia de anticuerpos y la seroconversión en caballos en las Islas Baleares. No obstante, el mayor foco de infección se produjo en varias localidades sevillanas, como Coria del Río y la Puebla del Río –donde el año pasado pidieron tratar la situación como amenaza de epidemia, y varios municipios de Extremadura de la comarca de Vegas Altas.

Desde el municipio sevillano de la Puebla del Río, Rogelio de la Carrera, portavoz del Ayuntamiento, confirma a THE OBJECTIVE que este año el tratamiento preventivo ha empezado antes. «En el núcleo urbano, el Ayuntamiento lleva desde febrero realizando imbornales en zonas verdes y espacios de más humedad. Y la diputación, empezó en marzo con un encargo a Tragsatec y licitaciones a empresas que están tratando principalmente con larvicida para frenar el ciclo reproductivo. La Junta de Andalucía también ha aumentado y adelantado las inspecciones con más trampas para analizar qué número de mosquitos hay y cuáles tienen el virus del Nilo», explica el sevillano, que asegura que, de momento, «hay poco mosquito y no hay virus». La Consejería de Salud de la Junta informaba recientemente de que la vigilancia este año se ha adelantado un mes con el trampeo de mosquitos con resultados negativos de presencia del virus del Nilo occidental en las provincias de Cádiz y Sevilla.
Prevención en casa
A esta estrategia se ha sumado recientemente la Junta de Extremadura, que ha activado una línea de ayudas dirigida a municipios de menos de 20.000 habitantes y entidades locales menores. El objetivo es reducir el riesgo de transmisión y contener el avance del virus del Nilo. En concreto, la Junta destinará este año 265.000 euros a los trabajos, mientras que la Diputación de Badajoz invertirá 215.000. En total, serán unos 470.000 euros los que se movilicen para combatir la proliferación del mosquito en zonas sensibles como Vegas Altas.
Los expertos llaman a no bajar la guardia, ya que el riesgo vuelve a ser muy alto y habrá que esperar a las próximas semanas para ver si son eficaces las medidas aplicadas este año. Se aconseja a la población de los municipios más afectados evitar zonas de riesgo y usar repelentes. A su vez, se recomienda evitar cúmulos de agua en macetas y fuentes y usar mosquiteras en las casas.