Alarma por un posible «Wuhan catalán»: un laboratorio está a un kilómetro del foco de peste
Agricultura apunta a un organismo público catalán que se dedica a investigar esta enfermedad animal

Instalaciones de CReSA.
Las alarmas han saltado ante la posibilidad de que el brote de peste porcina africana haya salido del Centro de Investigación en Sanidad Animal (Cresa), cuyas instalaciones están a un kilómetro del primer foco del brote en la zona de Bellaterra, al norte del parque natural de Collserola, en la provincia de Barcelona.
Cresa es un organismo público catalán que se dedica precisamente a investigar esta enfermedad y pertenece al Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias, dependiente de la Consejería catalana de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, dentro del Govern de Salvador Illa.
Sus instalaciones se encuentran a menos de mil metros de distancia del brote de peste porcina, pese a que la Generalitat sugirió al principio que llegó a España vía carretera por un embutido contaminado que podrían haber ingerido jabalíes. El hecho de que este centro catalán se dedique a investigar la enfermedad que ha causado el brote llevó a algunos militares a extender la sospecha de que haya sucedido «algo similar a lo del covid y el famoso laboratorio de Wuhan» hace casi seis años, según fuentes militares consultadas por THE OBJECTIVE, aunque esto último nunca quedó acreditado de forma oficial.
Precisamente, las citadas fuentes vinculan la «celeridad» en el envío de los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) a la zona cero de la peste porcina con esta posible fuga de la enfermedad de dicho laboratorio como pudo ocurrir en la ciudad china. En todo caso, la intervención en Collserola, a petición de la Generalitat, ha causado mofas y críticas dentro del Ejército por la tarea encomendada a los militares de aniquilar jabalíes o localizar ejemplares muertos de esta especie en la comarca barcelonesa del Vallés Occidental.
Entre mandos de la milicia circula en los últimos días la recreación de una medalla fake con el nombre de «operación cochinillo», los colores de la bandera catalana en el pasador y la imagen de un militar de la UME clavando una lanza a un jabalí con la conocida boina color mostaza de la unidad a la que pertenece (ver abajo).

El giro en la investigación se produjo este viernes cuando el Ministerio de Agricultura desveló que el Centro de Investigación en Sanidad Animal (CISA-INIA) de Valdeolmos (Madrid), un laboratorio de referencia de la UE, envió un informe al Gobierno central en el que abre la puerta a que el brote de peste porcina africana descubierto en Cataluña proceda de un laboratorio.
«Todos los virus circulantes en la actualidad en los Estados miembros pertenecen a los grupos genéticos 2-28 y no al nuevo grupo genético 29 al que pertenece el virus causante del foco en la provincia de Barcelona, muy similar al grupo genético 1 que circuló en Georgia en 2007», subrayó el departamento de Luis Planas.

La similitud entre ambas cepas levantó las sospechas del laboratorio, ya que «los virus, en condiciones naturales, cuando se propagan mediante ciclos de infección en animales sufren, en mayor o menor medida, cambios en su genoma». Por eso, «el hallazgo de un virus similar al que circuló en Georgia no excluye, por tanto, que su origen pueda estar en una instalación de confinamiento biológico», concluyó Agricultura refiriéndose al Cresa catalán.
