Crecen las voces en China que piden legalizar tener hijos fuera del matrimonio
El país asiático tiene la tasa de natalidad más baja del mundo con 9,2 nacimientos por cada mil habitantes. Los resultados de un censo oficial elaborado por el Diario del Pueblo, el periódico principal del Partido Comunista de China, muestran que las mujeres chinas tienen de promedio 1,05 hijos. Las multas por tener más de dos o fuera del matrimonio, conocidas como cuotas de mantenimiento social, pueden llegar a decenas de miles de euros. «Debido a la baja natalidad lo correcto sería permitir a las mujeres solteras tener hijos», señala Wu Youshui, un abogado de Hangzhou, en declaraciones para The New York Times. La semana pasada, tres grupos de la sociedad civil de la ciudad de Guangzhou redactaron un informe en el que pedían al Gobierno una mayor libertad reproductiva para las mujeres. Una lucha a la que se han unido incluso las mujeres lesbianas del país, ya que el matrimonio entre personas del mismo sexo también está prohibido en China.
El Gobierno de China puso fin a la política del ‘hijo único’ en octubre de 2015, pero su crisis demográfica no ha mejorado desde entonces. Además, su poderoso aparato de planificación familiar sigue multando a las parejas que tienen más de dos hijos y a las mujeres que tienen alguno fuera del matrimonio. Y los ciudadanos chinos se están empezando a hartar de estas medidas represivas.
El país asiático tiene la tasa de natalidad más baja del mundo con 9,2 nacimientos por cada mil habitantes. Los resultados de un censo oficial elaborado por el Diario del Pueblo, el periódico principal del Partido Comunista de China, muestran que las mujeres chinas tienen de promedio 1,05 hijos. Las multas por tener más de dos o fuera del matrimonio, conocidas como cuotas de mantenimiento social, pueden llegar a decenas de miles de euros. «Debido a la baja natalidad lo correcto sería permitir a las mujeres solteras tener hijos», señala Wu Youshui, un abogado de Hangzhou, en declaraciones para The New York Times. La semana pasada, tres grupos de la sociedad civil de la ciudad de Guangzhou redactaron un informe en el que pedían al Gobierno una mayor libertad reproductiva para las mujeres. Una lucha a la que se han unido incluso las mujeres lesbianas del país, ya que el matrimonio entre personas del mismo sexo también está prohibido en China.