Murtaza, el niño afgano que se hizo una camiseta de Messi con una bolsa, conoce al delantero
El argentino ha cogido al pequeño en brazo, que llevaba una de las camisetas que recibió el pasado febrero, y juntos se han hechos varias fotografías. El encuentro se ha producido en Medio Oriente, donde se encuentra la plantilla del Barcelona para jugar este martes un amistoso contra el Al Ahli, al que Murtaza ha sido invitado junto a su familia. Hijo de agricultores afganos con escasos recursos económicos, la foto original del niño fue tomada por su hermano mayor, Humayun, que las publicó en su página de Facebook. Desde ese momento y gracias al poder de las redes sociales, se hizo viral. Sin embargo, parece que no gustó mucho en Afganistán. Tras recibir varias amenazas de muerte y por miedo a que el pequeño fuese secuestrado, Murtaza y su familia tuvieron finalmente que abandonar su vivienda y ahora viven en Quetta, Pakistán.
A principios de año, su imagen con una camiseta de Leo Messi hecha con una bolsa de plástico conmovió a las redes sociales y dio la vuelta al mundo. Tras conocer la historia, el delantero no dudó en ponerse en contacto con Murtaza y enviarle dos camisetas, una del Barça y otra de la selección argentina, además de un balón. Ahora en Qatar ha podido conocerlo personalmente.
El argentino ha cogido al pequeño en brazo, que llevaba una de las camisetas que recibió el pasado febrero, y juntos se han hechos varias fotografías. El encuentro se ha producido en Medio Oriente, donde se encuentra la plantilla del Barcelona para jugar este martes un amistoso contra el Al Ahli, al que Murtaza ha sido invitado junto a su familia. Hijo de agricultores afganos con escasos recursos económicos, la foto original del niño fue tomada por su hermano mayor, Humayun, que las publicó en su página de Facebook. Desde ese momento y gracias al poder de las redes sociales, se hizo viral. Sin embargo, parece que no gustó mucho en Afganistán. Tras recibir varias amenazas de muerte y por miedo a que el pequeño fuese secuestrado, Murtaza y su familia tuvieron finalmente que abandonar su vivienda y ahora viven en Quetta, Pakistán.