Suspendida de un cable y agarrada con los dientes a un helicóptero que sobrevolaba las cataratas del Niágara, así ha superado el récord Guinness de altura la acróbata Erendira Wallenda, que además ha roto el récord de su propio marido, Nik Wallenda.
Integrante de una célebre familia de artistas de circo, Wallenda ha llevado a cabo su hazaña frente a cientos de espectadores desde el lado estadounidense y desde el canadiense. Acostumbrada a acrobacias espectaculares, Wallenda ha celebrado con esta espectacular acrobacia el quinto aniversario de otra hazaña lograda por su marido, que atravesó las mismas cataratas caminando sobre un cable ante las cámaras de televisión.
Ha sido el propio Nik Wallenda quien ha supervisado la actuación de su mujer desde el helicóptero. Tras realizar varias acrobacias en un aro, la acróbata ha estado dos veces, durante diez segundos cada una, colgada por la boca a 90 metros de altura sobre el agua. Con esta hazaña ha superado el récord de altura para el libro Guinness, que logró su marido al colgarse de la boca a unos 75 metros por encima de un parque de atracciones de Estados Unidos en el año 2011.
Después de la actuación y ya en tierra firme, la artista ha dicho que no ha podido oír la música que había elegido. “He hecho como si hubiera estado en el entrenamiento en mi jardín, y me he sentido lo suficientemente cómoda para colgarme una segunda vez de la boca”, ha afirmado.
