Las mujeres que trabajan de noche tienen más riesgo de contraer cáncer
Las mujeres que suelen trabajar de noche en Europa y en Norteamérica tienen un 19% más posibilidades de contraer cáncer que aquellas que trabajan durante el día, según un estudio publicado en el diario Cancer Epidemiology, Biomarkers and Prevention.
Las mujeres que suelen trabajar de noche en Europa y en Norteamérica tienen un 19% más posibilidades de contraer cáncer que aquellas que trabajan durante el día, según un estudio publicado en el diario Cancer Epidemiology, Biomarkers and Prevention.
«Nuestro estudio indica que el trabajo nocturno es un factor de riesgo para los cánceres comunes en mujeres», ha explicado el autor del estudio Xuelei Ma, un oncólogo del West China Medical Center de la Universidad Sichuan en Chengdu, China.
«Nos sorprendió ver la asociación entre el trabajo nocturno y el riesgo de cáncer de mama solo entre las mujeres de Norteamérica y Europa», agrega Xuelei. Por cada cinco años de trabajo nocturno, aumenta en un 3,3% las probabilidades de contraer cáncer de mama.
La principal causa de este riesgo se debe al aumento de las hormonas sexuales, según el científico. «Es posible que las mujeres de esos lugares tengan niveles más altos de hormonas sexuales, que se han asociado positivamente con cánceres relacionados con hormonas, como el cáncer de mama».
La revisión de este informe incorporó 61 estudios anteriores sobre el mismo tema, con 3,9 millones de participantes de Norteamérica, Europa, Australia y Asia, y diagnosticando más de 110.000 cánceres.
Por otra parte, diversas investigaciones han mostrado que el trabajo nocturno puede alterar los ritmos cardíacos, provocando cambios hormonales y metabólicos, aumentando así el riesgo de cáncer, diabetes y depresión.
El sobrepeso, otra causa del cáncer de mama
Las mujeres con sobrepeso tienen más probabilidades de que un tumor haya crecido considerablemente en el momento del diagnóstico de un cáncer de mama, según un estudio presentado en noviembre en la Sociedad de Radiología de América del Norte, en Chicago.
El estudio, realizado con más de 2.000 mujeres en Suecia de entre 55 a 74 años, ha demostrado que tanto la obesidad como una mayor cantidad de tejido en las mamas están relacionados con una creciente probabilidad de tener un tumor más grande en el momento del diagnóstico.