Bruselas quiere que en 2030 todos los envases de plástico sean reciclables
Hasta ahora China había funcionado como la gran planta de reciclaje del planeta y en ese país se reciclaba en 2015 el 30% del plástico utilizado en la UE.
La Comisión Europea (CE) ha lanzado este martes una nueva estrategia para limitar el impacto de los plásticos en el medioambiente, con el objetivo de que todos los envases de ese material producidos en la Unión Europea (UE) en 2030 estén diseñados para que puedan ser reciclados o reutilizados.
«Hay urgencia en actuar sobre los plásticos porque tienen consecuencias muy negativas no solo en el medioambiente sino también en nuestra salud«, ha declarado en una entrevista con Efe el eurocomisario de Medioambiente, el maltés Karmenu Vella.
La iniciativa comunitaria ha sido presentada tras la reunión del colegio de comisarios celebrada en Estrasburgo y se centra en los plásticos de un solo uso, como envases o botellas, después de que se hayan prohibido en toda la UE que los supermercados ofrezcan gratuitamente bolsas de uso único.
El vicepresidente primero de la Comisión Europea, Frans Timmermans, ha recordado en la presentación de que «cada segundo desaparecen 700 kilos de plástico en nuestros océanos» y que el 50% del plástico de los envases acaban en las playas de la UE.
«Si no cambiamos de política, en 2050 habrá más plásticos que peces en el mar», ha agregado Timmermans, quien ha presentado la iniciativa como parte del camino hacia «una economía en la que es rentable reciclar plásticos» porque el plástico no reciclado que se desperdicia cada año podría alcanzar un valor de más de 70.000 millones de euros.
La nueva estrategia comunitaria aboga, además, por mejorar la trazabilidad de los elementos químicos contenidos en los productos plásticos para facilitar su reciclaje, así como por implementar nuevas reglas armonizadas para la separación de esos deshechos, cuya tasa actual de reciclaje no alcanza el 30%, lejos de otros materiales como el papel, el vidrio o el metal.
La UE declara la guerra al plástico. | Foto: Sergei Grits / AP
La Comisión Europea dedicará especial atención a los microplásticos (de entre 0,1 y 5.000 micras) porque son «un gran problema no solo para el ecosistema marino sino también para la salud de los ciudadanos», ha indicado Vella.
Algunas de esas partículas se generan con el uso de un producto, por ejemplo, las ruedas de un coche o el lavado de la ropa, mientras que otras se añaden intencionadamente en la cadena de producción, como en el de los cosméticos o de la pintura.
El Ejecutivo comunitario perseguirá que se eliminen los microplásticos agregados intencionadamente para modificar la textura de los productos y desarrollará medidas para que las depuradoras de agua puedan atrapar esos minúsculos residuos y evitar que terminen convertidos en polución marina.
La nueva iniciativa de la Comisión Europea, que reúne y amplía varios proyectos en marcha, se ha dado a conocer justo después de que el pasado 1 de enero China limitase drásticamente las importaciones de desechos para ser tratados en su territorio.
Hasta ahora China había funcionado como la gran planta de reciclaje del planeta y en ese país se reciclaba en 2015 el 30% del plástico utilizado en la UE.
El sector del plástico aporta 1,5 millones de empleos a la UE y, según datos de la Asociación Europea de Productores Plásticos y de la oficina de estadística comunitaria, Eurostat, en 2014 se produjeron 25 millones de toneladas de desechos plásticos en la UE.