Proactiva Open Arms denuncia una campaña para "eliminar testigos" de naufragios en el Mediterráneo
La ONG Proactiva Open Arms, cuyo barco de salvamento fue incautado el 19 de marzo después de trasladar a Sicilia a más de 200 inmigrantes que había rescatado en el Mediterráneo, ha denunciado este jueves ser víctima de una campaña para «eliminar los testigos» de los naufragios de barcos que transportan inmigrantes desde Libia hacia Italia.
La ONG Proactiva Open Arms, cuyo barco de salvamento fue incautado el 19 de marzo después de trasladar a Sicilia a más de 200 inmigrantes que había rescatado en el Mediterráneo, ha denunciado este jueves ser víctima de una campaña para «eliminar los testigos» de los naufragios de barcos que transportan inmigrantes desde Libia hacia Italia.
«Proactiva Open Arms es un objetivo más de una contundente campaña institucional, política y mediática que pretende eliminar los testigos que denuncian las vulneraciones de derechos humanos en el Mediterráneo», ha denunciado su fundador Oscar Camps en una rueda de prensa celebrada en Barcelona.
Su organización se enfrenta a una acusación por un presunto delito de ayuda a la inmigración ilegal en Italia después de una denuncia de la Fiscalía de Catania por el rescate de más de 200 migrantes y su desembarco en el sur del país.
Durante esa operación, la ONG se negó a trasladar a los inmigrantes a un barco de la guardia costera libia sobre quien recaía la coordinación del rescate, que llegó más tarde al naufragio.
Camps ha criticado la actuación del gobierno de Roma de delegar la responsabilidad de salvamento a Libia, un país muy inestable y con un dudoso respeto a los derechos humanos. Devolverlos a Libia «significa enviarlos de vuelta al infierno del que huyen», ha subrayado.
Camps ha confirmado la noticias sobre la incautación del barco, con el que la organización ha rescatado más de 5.000 migrantes desde el año pasado.
«Nuestra organización es muy pequeña, somos moscas y nos están matando a cañonazos», se ha lamentado Camps, que ha pedido donaciones tanto a los ciudadanos como a la instituciones.
Las trabas judiciales italianas, las amenazas de la armada libia y la disminución del flujo de inmigración hicieron disminuir en un solo año de 12 a dos el número de barcos humanitarios que patrullan la zona, informa AFP.
Uno de los abogados de la ONG, Eduard Aguayo, ha recordado que el juez instructor de Catania desestimó el martes la acusación de delito de organización criminal y ahora la fiscalía de Ragusa deberá volver a examinar el caso, esta vez solo bajo la presunción de un delito de ayuda a la inmigración ilegal.
El fiscal dispone de 20 días para decidir si mantiene la inmovilización del barco y para presentar una nueva querella contra la jefa de misión, Anabel Montes, y el capitán del buque, Mark Reig, sobre quienes podrían caer penas de hasta tres años de prisión y una sanción de 15.000 euros por cada migrante desembarcado. Ambos han decidido permanecer en Italia para colaborar con la justicia, aunque tienen libertad de movimiento, informa EFE.
Campaña a favor de Open Arms
Desde que se conoció la noticia de que el barco de Opens Armas había sido incautado por las autoridades italianas a su llegada a Sicilia, se han sucedido las expresiones de apoyo a la ONG y su labor humanitaria a través de una campaña en redes sociales en la que participan no sólo ciudadanos anónimos, sino también numerosos personajes conocidos – actores, cantantes, periodistas mediante el #FreeOpenArms
Si salvar vidas es un crimen, no podrán detener a miles de criminales.
Miles de gracias por ser cómplices y acompañarnos en el lado de la vida.
Sé cómplice tú también.#FreeOpenArms pic.twitter.com/S6vmKquL2D— PROACTIVA OPEN ARMS (@openarms_fund) 28 de marzo de 2018