Ocho años de cárcel para un pastor evangélico por abuso a menores
La esposa del reverendo recibe una pena de dos años de prisión por delitos de la misma naturaleza
La Audiencia Provincial de Murcia ha condenado a penas que suman ocho años de prisión al pastor evangélico de San Pedro del Pinatar José R.L., que abusó de dos menores, de uno de los cuales consiguió que se acostara con su esposa, a la que se ha condenado a dos años de cárcel.
La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, señala que para cometer los abusos por los que es condenado, el pastor se valía de la superioridad que tenía sobre los menores, que procedían de familias desestructuradas, y de la cercanía que tenía con los feligreses por el ejercicio de su ministerio. El relato de hechos probados señala que la mayor parte de ellos se cometieron en su domicilio, ubicado en San Pedro del Pinatar.
Uno de los abusos se produjo en 2009, cuando sometió a diversos tocamientos a una niña que entonces tenía 13 años tras preguntarle si conocía lo que era el placer y contestarle ella que sí, pero que no lo había practicado nunca. Otro de los hechos por los que resulta condenado se produjo en el verano de 2013, cuando propuso a un niño de 13 años mantener relaciones sexuales con su esposa, también condenada, para «curarse» así de sus prácticas masturbatorias. En junio de aquel mismo año inició unas prácticas sexuales con una niña de 14 años que se prolongaron hasta noviembre de 2014. El tribunal de la Audiencia dice también que en febrero de ese mismo año, junto con su entonces pareja, mantuvo relaciones sexuales con una adolescente de 15 años de edad.
La sentencia condena al pastor evangélico a dos penas de cuatro años de cárcel cada una por sendos delitos de abusos sexuales, con aplicación de la atenuante de dilaciones sexuales. Además, se le imponen dos órdenes de alejamiento en cumplimiento de las cuales no podrá acercarse a menos de 100 metros de los menores perjudicados por tiempo de cuatro y cinco años. La mujer ha resultado condenada a dos años de prisión por un delito de abusos sexuales y no podrá acercarse a menos de 100 metros del menor perjudicado por tiempo de dos años.
La segunda esposa del pastor, también imputada en la causa, ha quedado absuelta porque la Audiencia de Murcia señala que la menor denunciante aceptó el ofrecimiento hecho por aquella de mantener relaciones sexuales y de participar en un trío con el otro acusado.