Las ingresos de familias vulnerables bajan a menos de 7.000 euros al año por la crisis del coronavirus
Las familias vulnerables han empeorado notablemente su situación por la crisis del coronavirus, pues han visto reducidos sus ingresos en un 31%, hasta situarse en una media de 6.942 euros anuales, según los resultados de una encuesta realizada por la ONG Save the Children.
Por qué es importante: tres meses después de que llegara el coronavirus a España, el 32% de las personas de familias vulnerables han perdido su empleo y sus ingresos se han reducido notablemente, aunque ya se encontraban por debajo del umbral de la pobreza. Esto ha afectado también a los niños de las familias vulnerables, que han sido los que más dificultades han tenido para seguir con su educación.
Save the Children ha llevado a cabo una encuesta entre las familias que atiende en la Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana, Cataluña, Andalucía, Castilla- La Mancha y Euskadi con el objetivo de conocer el impacto y la evolución de estos hogares debido al cierre de las escuelas y las medidas para frenar la expansión del virus.
Antes de la pandemia, las familias en situación de vulnerabilidad encuestadas ganaban de media 10.143 euros al año, «lo que ya las situaba por debajo del umbral de la pobreza», señala la ONG. Tres meses después, el 32% ha perdido su empleo y entre quienes no han visto modificada su situación laboral, el 62% no tenía trabajo previamente.
«La situación de estos hogares es muy precaria. O no tenían trabajo previamente o lo han perdido a raíz de la crisis. Esto va a tener consecuencias negativas en los niños y niñas. Numerosos estudios demuestran la conexión entre la situación laboral de los padres y madres y el éxito escolar de los hijos. A mayor inestabilidad laboral menor probabilidad de que los menores obtengan el graduado escolar a los 15-16 años y mayor de que dejen los estudios», explica Catalina Perazzo, directora de Políticas de Infancia y Sensibilización de Save the Children.
Las mujeres, más afectadas
Aunque el perfil mayoritario de los hogares a los que acompaña Save the Children es el de una familia nuclear, destaca un 31% que está encabezado por una madre sola de nacionalidad española, que tiene dos hijos o hijas a cargo y que carecía de empleo previo a la crisis.
La encuesta arroja que son las mujeres las que evidencian mayor precariedad y pobreza laboral, lo cual las sitúa en peor lugar para afrontar un nuevo periodo de crisis, especialmente las jóvenes, las migrantes y las que tienen baja cualificación, explica la ONG.
Sobre las mujeres recae además el peso de los cuidados. Según la encuesta, la mayor parte de las veces (el 57%) son las madres las que apoyan a los niños y niñas con las tareas escolares, «lo que unido a que también sean las principales responsables de las tareas del hogar (68%) tiene como consecuencia inmediata falta de tiempo, que puede llevar a aumentar los niveles de estrés y ansiedad».