En 2019 se registró un récord de violencia contra los trabajadores humanitarios

El año 2019 fue el peor en cuanto a violencia para los trabajadores humanitarios, según ha anunciado la ONU con motivo del Día Mundial de la Ayuda Humanitaria.

Los datos: en 2019, los ataques contra trabajadores humanitarios superaron los de los años anteriores, con 483 personas agredidas, de las cuales 125 fueron asesinadas, 234 heridas y 124 secuestradas, según los datos del centro de investigación Humanitarian Outcomes, citados por la ONU. Estas cifras suponen un aumento del 18% en el número de víctimas respecto al año anterior. 

Solo el 9 de agosto, murieron en ataques Níger seis humanitarios de la ONG francesa Acted junto con el conductor y el guía nigerinos, cuando visitaban la reserva de girafas de Kuré, a 60 kilómetros al sureste de la capital Niamey.

En 2019, la mayoría de los ataques se produjeron en Siria, Sudán del Sur, República Democrática del Congo, Afganistán y República Centroafricana. En Mali y Yemen se han duplicado los ataques en comparación con el año anterior.

El pasado año se registró un recrudecimiento de los ataques contra los trabajadores sanitarios, en particular contra médicos en Siria y humanitarios comprometidos con la lucha contra el ébola en República Democrática del Congo.

«A los trabajadores humanitarios del mundo entero que realizan un trabajo importante y valiente en primera línea, les decimos: ‘gracias’», ha declarado el secretario general adjunto para los asuntos humanitarios de la ONU, Mark Lowcock. «La mejor manera de rendir homenaje a los trabajadores humanitarios es financiando su trabajo y garantizando su seguridad», ha añadido.

El Día Mundial de la Ayuda Humanitaria corresponde al día del atentado contra la sede de la ONU en Bagdad, el 19 de agosto de 2003, que le costó la vida a 22 personas. Desde entonces, cerca de 5.000 humanitarios han sido asesinados, heridos o secuestrados. En la década 2010-2019, los ataques aumentaron 117% con relación al periodo 2000-2009, según la ONU.