Fatiga, náuseas, escalofríos: una voluntaria de Pfizer describe los efectos secundarios de la vacuna

La enfermera estadounidense Kristen R. Choi, participante de la tercera fase del ensayo de la vacuna desarrollada por Pfizer, ha relatado en la revista científica The Journal of the American Medical Association su experiencia personal tras recibir su dosis. Porque, después de la segunda inyección, Choi sufrió, combinados, hasta seis efectos secundarios que coinciden con los síntomas del coronavirus[contexto id=»460724″]: fatiga, dolor de cabeza, escalofríos, fiebre y dolor muscular y articular.

Por qué te lo contamos: la vacuna de Pfizer tiene, según sus propios estudios, una efectividad del 95%. Los especialistas médicos han alertado de que es posible que algunas personas sufran efectos secundarios adversos (como las personas alérgicas), pero será un porcentaje muy pequeño.

En cualquier caso, no es habitual que los voluntarios experimenten todos estos síntomas a la vez, como le ha sucedido a Kristen Choi. Y la enfermera ha defendido la necesidad de explicar claramente los posibles efectos secundarios para que los mensajes erróneos y la desconfianza no se multipliquen.

En su artículo, explica que vio el anuncio de Pfizer en Instagram y se inscribió como voluntaria porque creyó que sería una acción honorable. A pesar del dolor y la incertidumbre experimentados, reconoce que volvería a participar en los ensayos clínicos. Tal y como aclara, en el caso de Pfizer, los efectos secundarios, precisamente, son un indicador de que el organismo está recibiendo el material genético necesario para combatir al virus.

La enfermera detalla que la primera dosis de la vacuna no le provocó ninguna reacción inesperada, pero que la segunda conllevó dolor intenso en el brazo, mareos, frío, náuseas y fuertes dolores de cabeza. Por la noche, su cuerpo se calentó y el dolor muscular apenas le permitió levantar el brazo. Sin embargo, al día siguiente todos los síntomas habían desaparecido, salvo la marca de la inyección.

Según los responsables de Pfizer, en la fase 1 del ensayo, los efectos que experimentó Choi fueron comunes en muchos voluntarios de 18 a 55 años. Concretamente, el 75% sintió fatiga, el 67% dolor de cabeza y el 33% escalofríos. Lo raro es sufrir, a la vez, todos los de Choi. «Afortunadamente, mi experiencia de padecer todos los síntomas juntos parece ser poco común», explica en el artículo.

Además, a la enfermera también le preocupa que estos efectos pueden suponer un impedimento para que la mayoría de los ciudadanos confíe en la vacuna. Choi cierra su texto poniendo el foco en la capacidad de comunicación de los médicos, que deberán ser capaces de explicar que la fatiga o el dolor de cabeza son respuestas normales del cuerpo, a pesar de que se parezcan a los síntomas del COVID-19.