La activista Helena Maleno denuncia que Marruecos la ha «deportado y expulsado con violencia»
La activista Helena Maleno ha denunciado este lunes que Marruecos la ha «deportado y expulsado con violencia» y ha acusado al Ministerio del Interior de España y a la Policía marroquí de hostigamiento y de haber puesto en peligro su vida y la de su hija.
En contexto: la portavoz del colectivo Caminando Fronteras -que ayuda a inmigrantes que se encuentran en dificultades en el mar durante su viaje a España– ha indicado que fue expulsada de Marruecos, donde ha vivido durante dos décadas, el pasado 23 de enero y que estuvo separada durante 32 días de su hija, con la que no le permitieron reunirse.
«Desde abril de 2020 he sufrido un total de 37 ataques, amenazas de muerte, agresiones, seguimientos, vigilancia policial, escuchas telefónicas y dos asaltos a la vivienda de la familia. El Ministerio del Interior, en concreto la UCRIF (Unidad Central de Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades documentales de la Policía Nacional), en colaboración con la Policía marroquí, son los responsables de este hostigamiento, que ha llegado a poner en peligro mi vida y la de mi hija», ha aseverado Maleno en un vídeo publicado este lunes.
En concreto, ha detallado que el 23 de enero la Policía marroquí le denegó la entrada en el aeropuerto de Tánger y fue deportada en un vuelo a Barcelona: «Nadie me explicó lo que estaba pasando, el trato fue vejatorio, los gestos y empujones del personal de Air Arabia me indicaron que iba a ser deportada», ha recordado.
Una deportación de la que, asegura la activista, «personal del Ministerio del Interior estaba al tanto», a diferencia de Exteriores. Maleno ha destacado los «esfuerzos» de ese departamento y de la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, por protegerla a ella y a su familia.
Fuentes del departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska han asegurado a Efe que «ni el Ministerio del Interior ni la Policía Nacional han tenido ninguna participación en este hecho».
Maleno ha lamentado que, a pesar de que dos procedimientos judiciales en España y Marruecos han reconocido que su labor en defensa de los derechos de las personas migrantes no es un delito, ha padecido años de criminalización, violencia y amenazas, tanto en carne propia como en la de sus familiares.
Preguntada por si Interior le ha dado algún tipo de explicación, Maleno ha dicho: «Interior jamás ha querido reunirse con nosotras, jamás nos ha dado una respuesta, jamás se ha pronunciado por esos dossieres y jamás nos ha escuchado».
«Desgraciadamente las cloacas del Estado y sus actuaciones en la persecución de defensoras de derechos humanos tienen más poder», ha lamentado la activista, antes de exigir a los gobiernos de España y Marruecos que cesen en su persecución y la de su familia.
Ha reclamado además a las autoridades de los dos países que depuren responsabilidades dentro de sus instituciones y que reparen todo el daño que han causado: «Nos quieren calladas, no soportan vernos alzar la voz, no quieren que hablemos del negocio que hay en la frontera, nos quieren ver muertas, pero no nos vamos a callar», ha aseverado.