Un hundimiento en un colegio de Gijón obliga a reubicar a 200 alumnos
El derrumbe, que no ha ocasionado daños personales, se ha producido esta noche en un aula que acoge a niños de tres años situada en la planta baja del centro
Los 200 alumnos del colegio público Rey Pelayo de Gijón, donde esta noche se ha hundido el suelo de una de sus aulas de educación infantil, serán reubicados en centros cercanos, al menos, hasta dentro de tres semanas cuando se prevé que esté finalizado el informe integral que se ha encargado para analizar el estado de todo el colegio.
Así lo han afirmado la consejera de Educación, Lydia Espina, y la alcaldesa de Gijón, Ana González, tras hacer una visita al centro gijonés junto a técnicos del Ayuntamiento y de la Consejería.
El derrumbe, que no ha ocasionado daños personales, se ha producido esta noche en un aula que acoge a niños de tres años situada en la planta baja del centro, donde se han suspendido ya las clases hoy y mañana.
La consejera de Educación ha afirmado que la «prioridad absoluta» es la seguridad de toda la comunidad educativa, por lo que para asegurar la escolaridad de los menores las clases se suspenderán y los 200 alumnos se reubicarán de manera temporal en centros de la zona, un proceso que se encuentra «muy avanzado».
Por su parte, la alcaldesa de Gijón ha afirmado que tras el hundimiento se ha encargado un informe técnico que diga fehacientemente si hay más daños y si el centro es seguro.
La empresa escogida es Cadasa, la misma compañía que realizó el informe tras el derrumbe de parte del techo del edificio del colegio San Vicente de Paúl, el 5 de enero de 2022, en el que murieron dos trabajadores.
El informe, que en su totalidad podría estar terminado en tres semanas, se dividirá en una primera fase que estará lista a principios de la semana que viene y que analiza el estado de la planta baja y la zona en la que se encuentra el aula afectada y en una segunda, que analizará todo el centro.
«No hay una primera información muy alarmante. No cabe ponerse en la peor situación posible», ha destacado la alcaldesa respecto a las primeras impresiones de los técnicos, que este jueves se han centrado en analizar el estado del aula de infantil donde se ha producido el derrumbe.
Este es uno de los cinco colegios para los que el Ayuntamiento de Gijón había reclamado fondos europeos con el fin de realizar una rehabilitación integral, ha explicado la alcaldesa, quien ha precisado que se reclamaron los fondos por la antigüedad de las instalaciones y no por sospechas sobre la seguridad.
«No hay que ligar esa reforma con lo que ha pasado hoy», ha remarcado la regidora, quien ha indicado que el colegio tiene más de 50 años y necesitaba unas mejoras.
«Lo que ha ocurrido aquí es una emergencia. No se puede generalizar o extrapolar para nada», ha aseverado la consejera de Educación, quien ha afirmado que no le consta que pueda suceder en «ningún otro espacio» porque se hace un «seguimiento constante».