Una ilustradora denuncia que el Consejo General de Médicos le ha plagiado 27 dibujos
La institución habría «reproducido» dibujos creados por una reconocida ilustradora: «Es como si el segundo autor hubiera estado metido en mi cabeza»
A la izquierda, ilustración de Mónica Lalanda (2019); a la derecha, nueva ilustración del OMC (2022).). | Cedida.
La médico y reconocida ilustradora Mónica Lalanda ha señalado que «ha emprendido acciones legales» contra el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) –la única organización que representa a todos los médicos de España– por «reproducir» 27 ilustraciones creadas por ella y usarlas en uno de sus cursos. Paradógicamente, un proyecto de ética que se llama ‘El Buen Quehacer Médico’ y que comenzó una nueva edición el pasado 1 de octubre de 2022.
En conversaciones con THE OBJECTIVE, Lalanda cuenta que estas imágenes fueron dibujadas por ella misma en 2019 para el mismo curso que impartía el CGCOM junto con la Fundación para la Formación de la Organización Médica Colegial. «El contenido lo creamos de forma altruista un grupo de médicos. Yo, además, creé las viñetas para dar realismo a los escenarios que se planteaban», relata la médica. Sin embargo, el pasado octubre salió una nueva edición de ‘El Buen Quehacer Médico’ donde todos los dibujos de Lalanda fueron borrados y, en su lugar aparecen otros, que son «exactamente» las ideas de la ilustradora pero «creadas por otro ilustrador».
«Son 27 ilustraciones que claramente no han sido inspiradas en los escenarios de los textos sino reproducidas sin pudor, a partir de las mías. También ha desaparecido mi nombre, como si nunca hubiera estado implicada en este trabajo», cuenta la ilustradora, que se dio cuenta de lo sucedido tras la alerta de un compañero y que ya ha pedido mediante requerimiento legal al CGCOM que retire los dibujos, aunque sin éxito. «Lo primero ha sido hacerles un requerimiento legal en diciembre y que han ignorado. La semana pasada se ha vuelto a repetir y nos han vuelto a ignorar. El próximo paso es la denuncia en el juzgado», asegura Lalanda, que además, hace hincapié en el contrato firmado con el Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos en 2019 donde queda explícito que «cualquier adaptación, modificación o transformación sobre la obra original deberá estar previamente acordado con la autora».
Por su parte, THE OBJECTIVE ha contactado con el Consejo General de Médicos para conocer su versión de lo sucedido, pero solo han respondido con un escueto mensaje: «Hasta la fecha no tenemos constancia de ninguna denuncia por parte de la Dra. Mónica Lalanda».
«Me provoca inmensa rabia, yo no busco dinero, lo que quiero es sacar a la luz el pisoteo y denunciar el valor de las producciones artísticas. Este maltrato recurrente y este ninguneo a los autores por parte de individuos es terrible, pero si además lo hace una institución médica, a una compañera colegiada y en un proyecto que es además sobre profesionalismo y ética médica, se convierte en deleznable», responde por su parte la médica.
«Es como si el segundo autor hubiera estado metido en mi cabeza, es surrealista»
‘El Buen Quehacer del Médico’ está inspirado en parte en el Good Medical Practice del General Medical Council británico, y tiene como objetivo servir de instrumento a los médicos para alcanzar una conducta irreprochable y una actitud acorde con las expectativas de la sociedad, es decir, una actuación profesional de excelencia. De esta forma, plantea diferentes escenarios a los que se pueden enfrentar los clínicos –como atender a un paciente menor ebrio después de un botellón, mucha espera con un TAC decisivo o cómo actuar ante un compañero que presenta problemas relacionados con el alcohol- y a través de la guía orientan a los profesionales a cómo hacer frente a estas situaciones. Todo iba acompañado con las ilustraciones de Mónica Lalanda.
«Las posibilidades de que las viñetas de dos ilustradores se parezcan cuando los textos son tan abiertos, son remotas. Si te dicen: ‘La tía Marisa se cayó en la calle’ es imposible que dos ilustradores dibujen a señoras con el mismo peinado, ropa similar, collar de perlas, gafas que salen disparadas, un zapato que se sale, paraguas, misma postura de caída…. No puede dar lugar a un dibujo tan parecido al mío, como si el segundo autor estuviera metido en mi cabeza, es surrealista», relata la médica.
«El Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos se mantiene por las cuotas de todos los colegiados, su comportamiento debería ser transparente y ejemplar, la ética su bandera y el profesionalismo su causa. Que hagan cosas como estas y que además no atiendan a un requerimiento de una abogada es inaudito», señala la ilustradora indignada, que concluye: «Sigo esperando que descuelguen esos dibujos y bien pongan de nuevo los originales u otros creados a partir de los textos, además de una disculpa pública».
