La sequía en Cataluña hace emerger de un embalse una Iglesia que no se veía desde 1990
El pantano de Sau, el segundo con mayor capacidad de las cuencas internas de Cataluña, está al 10%, un nivel tan bajo que ha obligado a iniciar un trasvase
Cataluña está inmersa en una sequía prolongada después de 36 meses de lluvias por debajo del promedio, con algunas partes tan secas que las autoridades ya están pidiendo a la gente que reduzca el uso del agua, aunque muchos ciudadanos sigan sin ser conscientes. Y, mientras lo meteorólogos advierten que lo peor puede estar aún por venir, los embalses muestran las cicatrices de una sequía sin precedentes que provoca que la región haya entrado en fase de excepcionalidad en los sistemas hídricos que abastecen al 80% de la población, lo que representa una ampliación de restricciones en usos agrícolas, industriales y urbanos, aunque sin afectación al agua de boca.
Alguno de los embalses que rodea Barcelona, como el de San Román de Sau, están tan bajos que antiguas construcciones que no se veían desde la última gran sequía, en 1990, han resurgido, una iglesia completa o un puente. Además, la gente vuela cometas en los lechos de los lagos, algunos pescadores aprovechan para coger peces con las manos desnudas y las aplicaciones de navegación muestran a alguien en medio del agua cuando está parado en tierra firme, tal y como reporta Reuters.
En general, los embalses de las cuencas internas, que son los que gestiona la Agencia Catalana del Agua (ACA), están al 28%, mientras que el pantano de Sau, el segundo con mayor capacidad de las cuencas internas de Cataluña, está al 10%, un nivel tan bajo que ha obligado a iniciar el trasvase al mayor embalse, el de Susqueda, que está al 36%.
Por el momento, la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, ha asegurado que el Ejecutivo catalán no tiene previsto aprobar nuevas medidas para frenar la sequía, más allá de las que han entrado en vigor este mismo martes. En rueda de prensa tras la reunión del Consell Executiu, Plaja ha asegurado que las actuales medidas ya «comportan limitaciones generalizadas en ámbitos concretos» y garantizan el agua de boca con un límite de litros.
«Ahora no está previsto que cambiemos de fase», ha explicado la portavoz, que ha explicado que el Govern trabaja con previsiones a corto y medio plazo, y ha concretado que la semana pasada decidieron pasar a la fase de excepcionalidad aunque aún no se habían alcanzado algunos parámetros, pero con la previsión de que no llovería en los próximos días.