Día Mundial del Cáncer de Mama: lo que debes hacer para detectar y prevenir esta enfermedad
Según la Asociación Española contra el Cáncer, el cáncer de mama es la principal causa de fallecimiento por cáncer en mujeres
Cada 19 de octubre, se conmemora el Día Internacional de Concienciación sobre el Cáncer de Mama. Esta fecha tiene como objetivo poner en relieve esta enfermedad y apoyar a las mujeres que enfrentan este desafío a diario.
Fue la Organización Mundial de la Salud (OMS) la entidad que estableció este día para conmemorar después de que la Fundación Susan G. Komen organizara una carrera en Nueva York en 1991, en la cual se entregaron lazos rosas a los participantes como símbolo de concienciación sobre este tipo de cáncer.
En el año 2022, se estima que en España se detectaron aproximadamente 34.740 casos nuevos de cáncer de mama, de acuerdo con las proyecciones del Observatorio del Cáncer de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) . Esto equivale a casi una tercera parte, es decir, alrededor del 30% de todos los casos de cáncer diagnosticados en mujeres.
Según la AECC, el cáncer de mama es la principal causa de fallecimiento por cáncer en mujeres y la Sociedad Española de Oncología Médica estima que en este año 2023 se diagnosticarán aproximadamente 35.000 nuevos casos.
¿Qué es el cáncer de mama?
El cáncer de mama es un tipo de tumor maligno que se origina en el tejido de la glándula mamaria. Los tumores malignos se caracterizan por un crecimiento desenfrenado y la capacidad de extenderse a otros tejidos.
Están formados por células que han acumulado cambios en su material genético, lo que les permite eludir los mecanismos de control que regulan la división celular. Además, evitan ser identificadas y eliminadas por el sistema inmunológico, lo que les permite crecer de manera descontrolada e invadir los tejidos circundantes.
De este modo, estas células también pueden viajar a través de la sangre o la linfa hacia otros órganos, donde pueden desarrollar nuevas lesiones, un proceso conocido como metástasis.
¿Cómo detectar está enfermedad?
La detección temprana del cáncer de mama es crucial. Las mujeres pueden deben realizar autoexámenes de mamas y deben estar atentas ante cualquier posible cambio. Además, las mamografías y los exámenes clínicos de mama son esenciales. Se recomiendan a partir de los 40 años o antes si hay antecedentes familiares.
Síntomas más frecuentes del cáncer de mama
Según la información de la AECC los síntomas más frecuentes son:
- Cambio de tamaño de alguna de las mamas.
- Irregularidades en el contorno mamario.
- Menor movilidad de una de las mamas al levantar los brazos.
- Alteración en la piel de la mama como: úlceras, cambios de color y aparición de lo que se denomina piel de naranja (por su aspecto similar a la piel de dicha fruta).
- Cambios en el pezón, como puede ser la retracción de este (hundimiento) o secreción amarillenta o sanguinolenta por el pezón.
- Aparición de un nódulo palpable en la mama o en la axila.
- Dolor óseo o cansancio extremo, que suelen aparecer en fases avanzadas de la enfermedad.
- Dolor en la mama a la palpación.
¿Qué se debe hacer ante la aparición de alguno de estos síntomas?
Si experimentas cualquiera de los signos anteriores, es importante que consultes con un médico. De esta manera, podrán llevar a cabo los exámenes requeridos y, en caso necesario, establecer un diagnóstico lo más temprano posible.
Estos síntomas no siempre indican una enfermedad grave; a veces pueden estar relacionados con afecciones menos preocupantes, por lo que acudir al especialista para salir de dudas es fundamental.
¿Cómo prevenir esta enfermedad?
El cáncer de mama generalmente resulta de una combinación de varios factores, lo que significa que múltiples causas contribuyen a su desarrollo. Por lo tanto, cuando hablamos de prevención, nos referimos a reducir el riesgo teniendo en cuenta los factores que pueden ser modificados para disminuir la probabilidad de padecer esta enfermedad.
Hasta día de hoy, sabemos que el exceso de peso u obesidad y un estilo de vida sedentario pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer de mama en mujeres. Por ello, es conveniente seguir una dieta saludable que permita mantener un peso adecuado y mantenerse en forma dejando de lado la vida sedentaria.
Un estudio amplio basado en observaciones encontró que perder tan solo un 5% de peso tanto antes como después de la menopausia podría disminuir la probabilidad de desarrollar cáncer de mama en un rango del 25% al 40% en comparación con las mujeres que no perdían peso.
Además, seguir una dieta al estilo mediterráneo, rica en frutas, verduras, pescado y carnes magras, puede reducir el riesgo de cáncer de mama. Además, algunos estudios han indicado que las mujeres que consumen cereales integrales en lugar de cereales refinados tienen un menor riesgo de padecer esta enfermedad.
En cuanto a la actividad física, es importante destacar que más de la mitad de la población no cumple con las recomendaciones de ejercicio establecidas por la OMS. Una investigación ha demostrado que realizar ejercicio físico de intensidad moderada o vigorosa puede disminuir el riesgo de cáncer de mama en un 25%.
Se aconseja también mantener un consumo de alcohol reducido, ya que su ingestión aumenta el riesgo de desarrollar esta enfermedad.
Por último, para mujeres que son portadoras de mutaciones genéticas de alto riesgo para el cáncer de mama, como BRCA1 y BRCA2, se recomienda la mastectomía profiláctica bilateral como medida preventiva, ya que en estos casos, el riesgo de desarrollar cáncer de mama a lo largo de la vida oscila entre un 50% y un 85%.