El pueblo aragonés que rompe estadísticas con la Lotería de Navidad: «Llevo ya tres premios»
Calatayud, de 19.000 habitantes, ha repartido 75 millones de euros desde 2021: un premio gordo, un cuarto y otro quinto
Hasta hace unos años, todo aquel que visitaba Calatayud (Zaragoza) solía preguntar por ‘La Dolores’ haciendo mención a la famosa copla que convirtió a esta joven mesonera en un mito popular de finales del siglo XIX. Ahora, en cambio, la realidad es bien distinta y es que quien llega a este municipio de 19.000 habitantes pregunta directamente por la Lotería de Navidad. ¿Por qué? Se preguntará. Porque lo que ocurre en esta pequeña ciudad es digno de estudio en facultades de matemáticas. Calatayud ha roto todas las estadísticas y lo dice hasta la propia Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado. En las últimas décadas, sus dos administraciones han repartido hasta diez premios del sorteo más conocido en España, es decir, cientos de millones de euros.
Así que cuando uno pasea por las calles de la localidad no es extraño cruzarse con bilbilitanos a los que les ha tocado algún premio de la lotería navideña o del Niño. No solo en un una o en dos ocasiones, sino hasta en tres. Es más, podría decirse que son más bien pocos los habitantes que no han tenido un golpe de suerte en la familia. Algo insólito tratándose de un municipio pequeño en el que la variedad de números que se vende es reducida, según cuenta a THE OBJECTIVE María Carrau, propietaria de la Administración de Lotería número 1 de Calatayud.
Esta lotera explica que vende como máximo entre 500 y 600 números de lotería distintos para el sorteo extraordinario cada año, lo que equivale a un 1% de los que suele expender, por ejemplo, la conocida Doña Manolita, en Madrid, la administración que suele repartir más premios en España por la gran cantidad de décimos que vende. Sin embargo, tal como han demostrado los últimos años, Calatayud es un caso único. De hecho, es lo que comentaba María hace poco con el delegado de Loterías en Aragón: «Nos reíamos porque es cierto, hemos tenido mucha suerte. Me decía que la probabilidad de que toque no cumple con la estadística, al final somos poca población, menos ventas y un volumen aún más bajo».
75 millones en dos años
Para llegar al último boleto premiado en la administración de los Carrau solo hay que echar la vista atrás un año, en concreto, al 22 de diciembre de 2022. Apenas habían salido las primeras bolas del bombo, cuando los niños de San Ildefonso sacaron el primer cuarto premio: 54289. El número, vendido casi de manera íntegra en Calatayud, regó la ciudad con 32 millones de euros y una alegría inmensa, sobre todo para un un conocido bar de la ciudad, Brindis, que eligió ese décimo para vendérselo a sus clientes. La emoción invadió la localidad, pero también la sorpresa y la fascinación: «¿Cómo era posible? ¿Qué posibilidades había?», se preguntaron muchos vecinos.
Las preguntas no eran baladíes. Y es que en 2021 la suerte había sonreído de nuevo a los bilbilitanos y no de cualquier forma, por partida doble. Si en Navidad un quinto premio, el 24.198, repartía 60.000 euros, el 6 de enero, el ‘gordo de la lotería del Niño dejaba 40 millones de euros con el 19570, la primera vez que ocurría en la localidad bilbilitana. Dotado con 200.000 euros al décimo y repartido íntegramente en Calatayud, entre las dos administraciones, la número 1 y la número 2 y el bar Café Central, hasta donde se desplazaron decenas de vecinos, todavía con la mascarilla en la boca, para celebrar y brindar con champagne.
La lotería del Real Madrid
Un colofón navideño que, además de llenar las cuentas bancarias de cientos de bilbilitanos, proclamó a Calatayud como uno de los municipios con ‘más suerte’ de España. Un título que ha desencadenado una locura total por la compra de décimos en los últimos tres años. Hace unas semanas, en el puente de la Constitución, se acumularon colas de decenas de personas . «Estamos agotados», confiesa Ana Serrano Ruiz, propietaria de la Administración número 2, en la calle Valentín Gómez. Esta bilbilitana cuenta que han aumentado las ventas un 15% respecto al año pasado.
«Ningún año he estado tan cansada antes del sorteo, llevamos mucho, mucho trabajo. En otras vísperas, no ha sido así. Estamos sin parar. El puente fue vender y vender, antes no abríamos y este año ha merecido la pena. Se ha notado muchísimo el turismo, ha venido mucha gente de fuera y entraban a comprar décimos», relata esta lotera. Algunos clientes le comentan incluso que tras los últimos premios «muchos madrileños han venido con listas y van tachando los sitios en los que compran lotería». «Yo no lo he visto, pero es lo que me comentan muchos días», cuenta, entre risas, Serrano.
En el caso de la administración Carrau, María señala que en 2022 aumentaron un 5% las ventas y apunta que todavía es pronto para hacer un balance de este año, aunque son optimistas. «Este año las ventas de números abonados se adelantaron a julio y agosto. Y muchas personas han venido directamente de Zaragoza y Madrid para comprar números y jugarlos con sus compañeros en la empresa. Nuestra lotería la juegan incluso en el Real Madrid, un socio es de aquí y siempre la lleva… Luego enseguida nos piden el número y se agota», revela la propietaria.
‘La tijera de oro’
El ‘estatus lotero’ que ha alcanzado Calatayud, en cualquier caso, no solo se ha fraguado en los últimos años. A los citados premios les preceden muchos otros. Otros tres quintos premios, en 2016, 2014 y 2011. El 98.538, premiado hace una década, dejó 9,6 millones en Calatayud. La administración número uno vendió 1.600 décimos del quinto premio que se repartieron casi por completo en el club de gimnasia Jiu-Jitsu de la ciudad bilbilitana que, como no podía ser de otro modo, celebró el premio al ritmo de Kung Fu Panda.
Pero la cosa no queda ahí. En 2010, el número que jugaba la peluquería José Luis, en la plaza del ayuntamiento de Calatayud, vendido por la administración de Ana Serrano, se llevó casi íntegro el segundo premio de la Lotería de Navidad. El 00147 dejó 58,1 millones de euros en la ciudad y unas navidades que la mayoría no ha olvidado. «Aún recuerdo cuando entré a la peluquería a por dos participaciones. Al ver el número le dije ‘ay qué feo es Jose Luis’. Y él me contestó: ‘todos entran en el bombo’. Y mira lo que pasó después. Fue una alegría muy grande. Es una locura lo que ha pasado aquí. A mi me ha tocado ya tres veces, a mucha gente, vaya», cuenta Mercedes, una vecina de 83 años. Hoy, cuentan algunos bilbilitanos, todos conocen a Jose Luis, todavía en activo, como ‘la tijera de oro’.
La lista de ‘premios navideños’ la completan otros dos quintos premios en 1986 y 1993, y finalmente… el Gordo de Navidad, en 1992, con el número 31.466. Aquel año, el sorteo dejó 15.000 millones de pesetas en el municipio aragonés, unos 170 millones de euros. La combinación, vendida por María Carrau, fue escogida por una de las peñas de las fiestas de verano en la localidad, La Rouna. Se repartió entre miles de habitantes. «Ese premio cambió la vida a mucha gente. Para esa época era mucho dinero. Hubo quienes abrieron negocios y otros aprovecharon incluso para casarse. Fue increíble», cuenta Rosa, una de las galardonadas en los noventa.
Millones en la Bonoloto
Otra prueba de que lo que ocurre en esta localidad no es precisamente corriente es que en los últimos meses se han repartido también premios millonarios en otros sorteos, según cuenta la lotera de la administración número 2 de Calatayud. «Nosotros dimos dos premios en una misma semana, a finales de junio: 814.000 euros en una Bonoloto y una primitiva de 60.000 euros. Pero es que la semana siguiente, un quiosco dio el primer premio de Lotería Nacional y en octubre, otro punto de venta dio el premio del millón del Euromillón… Esto está siendo una pasada», concluye Ana Serrano.