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La DGT avisa de lo que puede pasar si tu coche circula sin pasar la ITV

Su objetivo principal es garantizar que los vehículos se encuentran en condiciones de seguridad y funcionamiento

La DGT avisa de lo que puede pasar si tu coche circula sin pasar la ITV

Pasar la ITV. | Freepik

La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) es un control obligatorio que deben pasar todos los vehículos a motor que circulen por las carreteras españolas. Su objetivo principal es garantizar que los vehículos se encuentran en condiciones de seguridad y funcionamiento adecuadas para circular, minimizando así el riesgo de accidentes y protegiendo el medio ambiente.

Pasar la ITV es un trámite sencillo y obligatorio, pero que a menudo genera dudas entre los conductores. Qué es la ITV, por qué es importante pasarla y cuándo debes hacerlo. Se detallaran los pasos a seguir para pasar la ITV con éxito, incluyendo la documentación necesaria, los aspectos que se revisan en la inspección y los posibles resultados.

¿Cuándo pasar la ITV?

La periodicidad con la que debes pasar la ITV depende de la edad y el tipo de tu vehículo. En general, los vehículos nuevos deben pasar la ITV por primera vez a los cuatro años de su matriculación. A partir de ahí, la frecuencia de las revisiones aumenta, siendo anual para motocicletas y vehículos ligeros de hasta 3.500 kg, y cada dos años para turismos y vehículos ligeros de más de 3.500 kg. Los vehículos pesados, autobuses y ambulancias, deben pasar la ITV cada año.

Es importante recordar que el plazo para pasar la ITV comienza a contar desde la fecha de matriculación del vehículo, no desde la fecha de la última inspección. Por lo tanto, es recomendable programar la cita con antelación para evitar posibles sanciones.

Revisión del coche. Foto: Freepik

¿Por qué es importante pasarla?

Pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) es un requisito legal y una responsabilidad fundamental para todos los conductores que circulan por las carreteras españolas. A continuación, se detallan los principales motivos por los que es importante pasar la ITV:

  • Seguridad vial: la ITV es un instrumento esencial para garantizar que los vehículos que circulan por las carreteras se encuentran en condiciones óptimas de funcionamiento, minimizando así el riesgo de accidentes. Un vehículo que ha superado satisfactoriamente la ITV ofrece mayor seguridad tanto para sus ocupantes como para el resto de usuarios de la vía.
  • Protección del medio ambiente: los vehículos que no cumplen con los requisitos establecidos en la ITV pueden generar un impacto negativo en el medio ambiente debido a un mayor consumo de combustible y a la emisión de gases contaminantes. La revisión periódica ayuda a identificar y corregir posibles averías que puedan estar afectando negativamente al rendimiento del vehículo y, por lo tanto, contribuyen a reducir la contaminación del aire y el ruido.
  • Conducción responsable y cumplimiento de la ley: pasar la ITV es una obligación legal para todos los conductores, y no hacerlo puede acarrear sanciones económicas importantes. Además de cumplir con la normativa vigente, esta revisión demuestra una actitud responsable por parte del conductor, que se preocupa por la seguridad de sí mismo, de sus pasajeros y del resto de usuarios de la vía.
  • Evitar averías inesperadas y gastos adicionales: permite detectar fallos o averías en el vehículo en sus primeras etapas, cuando son más fáciles y económicos de reparar. De esta manera, se pueden evitar averías inesperadas en carretera, que además de suponer un riesgo para la seguridad, pueden generar gastos de reparación considerables.

¿Qué se revisa?

Los puntos clave que se revisan en la ITV son los siguientes:

  • Identificación del vehículo: la documentación del vehículo (permiso de circulación, tarjeta ITV y certificado de seguro) coincida con los datos del mismo y que no presente irregularidades. Se comprueba el número de bastidor, la matrícula y las placas de identificación.
  • Carrocería, chasis y exterior: se inspecciona el estado general de la carrocería, buscando daños estructurales, corrosión, deformaciones o golpes significativos. Se revisan las puertas, capó y maletero, asegurando su correcto funcionamiento y cierre. También se verifica el estado de los cristales, espejos retrovisores, paragolpes y luces exteriores.
  • Interior del vehículo: se comprueba el buen funcionamiento de los cinturones de seguridad, tanto delanteros como traseros, incluyendo su estado y anclajes. Se revisa el asiento del conductor, asegurando su correcta regulación y homologación. Se verifica el funcionamiento de las luces interiores, el claxon y otros elementos del salpicadero.
  • Alumbrado y señalización: correcto funcionamiento de todas las luces del vehículo, incluyendo las luces de cruce, largas, antiniebla, intermitentes, marcha atrás y freno. Se comprueba la intensidad, el color y la alineación de las luces, así como la integridad de las tulipas y faros.
Revisión coche. Foto: Pixabay

Emisiones y ruidos

Se realiza una prueba de emisiones contaminantes para verificar que el vehículo cumple con los límites establecidos según su categoría y fecha de matriculación. Se mide el nivel de ruido del motor y del escape para garantizar que no supera los valores máximos permitidos.

  • Frenos: correcto funcionamiento del sistema de frenos, incluyendo el pedal, los discos o tambores de freno, las pastillas o zapatas, los latiguillos y el líquido de frenos. Se realiza una prueba de frenado en un frenómetro para evaluar la eficacia y equilibrado del sistema.
  • Dirección: el estado de la dirección, incluyendo la columna de dirección, el volante, la rótula de dirección, la caja de dirección y los neumáticos delanteros. Se realiza una prueba de juego de la dirección para verificar su correcto funcionamiento.
  • Ejes, ruedas, neumáticos y suspensión: se revisa el estado de los ejes, ruedas y neumáticos, incluyendo la alineación de las ruedas, el equilibrado de las ruedas, la presión de los neumáticos y el desgaste de los mismos. Se comprueba el estado de la suspensión, incluyendo los amortiguadores, muelles y rótulas de suspensión.
  • Otros elementos: además de los puntos mencionados anteriormente, se pueden revisar otros elementos del vehículo en función de su tipo y características, como por ejemplo: el sistema de escape, el motor, la transmisión, el airbag, los sistemas de asistencia a la conducción (ABS, ESP, etc.) y el enganche de remolque (en caso de que el vehículo lo disponga).

¿Qué ocurre si no la paso?

Las consecuencias de no pasar la ITV en España varían según la gravedad de los defectos detectados en la inspección y el tiempo que transcurra desde la fecha límite para superarla. A continuación, se detallan las principales sanciones:

ITV desfavorable:

  • Si el vehículo presenta defectos leves o moderados que no comprometen la seguridad vial, la inspección se calificará como «desfavorable». En este caso, el conductor tendrá dos meses para reparar los fallos detectados y volver a pasar la ITV en una estación autorizada.
  • Durante este período de dos meses, el vehículo podrá circular con normalidad, pero el conductor deberá llevar consigo el informe de la ITV desfavorable y el justificante de cita para la nueva inspección.
  • Si el conductor no repara los fallos en el plazo de dos meses y sigue circulando con el vehículo, se considerará que está circulando con la ITV desfavorable, lo que conlleva una multa de 200 euros.
  • Además, si se produce un accidente y el vehículo no ha pasado la ITV desfavorable, la compañía de seguros podría no hacerse cargo de los daños.
Multas. Foto: Freepik

ITV negativa

  • Si el vehículo presenta defectos graves que comprometen la seguridad vial, la inspección se calificará como «negativa». En este caso, el vehículo no podrá circular por su propia cuenta y deberá ser retirado del lugar de la inspección en grúa.
  • El conductor tendrá que reparar los fallos detectados y volver a pasar la ITV en una estación autorizada. Para poder circular hasta la estación de ITV, el conductor deberá solicitar un permiso especial temporal de circulación, que tendrá un coste adicional.
  • Si el conductor circula con el vehículo sin haber obtenido el permiso especial temporal, se considerará que está circulando con la ITV negativa, lo que conlleva una multa de 500 euros y la inmovilización del vehículo.

ITV caducada:

  • Si el conductor no ha pasado la ITV dentro del plazo legal establecido, se considerará que está circulando con la ITV caducada. Esto supone una infracción grave que conlleva una multa de 200 euros.
  • Además, el agente de tráfico puede retirar el permiso de circulación del vehículo y el conductor solo podrá llevarlo a un taller o estación de ITV en grúa.
  • Si se produce un accidente y el vehículo no tiene la ITV en vigor, la compañía de seguros podría no hacerse cargo de los daños.
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