Denuncian la muerte por envenenamiento de un grupo de buitres cerca de Vegadeo (Asturias)
El Fapas acusa al Gobierno regional de tener en el «abandono absoluto» la conservación del patrimonio natural
El Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (Fapas) ha emitido una crítica severa hacia el Gobierno de Asturias, acusándolo de «abandono absoluto» en la conservación del patrimonio natural. Según Fapas, el descubrimiento de un grupo de buitres leonados muertos en las montañas cercanas a Vegadeo ha encendido las alarmas sobre la posible reaparición del uso de venenos, una práctica que se creía obsoleta.
«La imagen de buitres muertos junto a una carroña en los pastos de montaña alerta sobre la reaparición del uso del veneno», explicaron desde la organización. Además, mencionaron que fue una llamada anónima la que permitió localizar los cadáveres de los buitres en la Sierra de Bobia, alrededor de una carroña, lo que sugiere la colocación de veneno como cebo.
Desde Fapas han señalado que estos venenos actúan lentamente, incrementando el riesgo de un mayor número de víctimas entre los buitres, ya que la muerte puede ocurrir a varios metros o incluso kilómetros del punto inicial de envenenamiento. «Estos venenos matan lentamente, lo que hace sospechar que el número de buitres envenenados sea mucho mayor», lamentaron desde la organización.
Además, han denunciado que estos sucesos no son aislados y que en los últimos años se han repetido sin que haya acciones efectivas por parte de las autoridades para prevenir el uso de veneno en las montañas de Asturias. «Ocultar datos sobre los ejemplares muertos y mantener un círculo de silencio sobre estos atentados ecológicos, es la norma que impera actualmente en el Gobierno asturiano», criticaron desde Fapas.
El reciente episodio con los buitres se suma a otros casos donde animales protegidos, como lobos y osos pardos, han sido encontrados muertos debido a acciones furtivas. «Este hecho incrementa las sospechas de que la muerte de especies protegidas en Asturias, como osos, lobos y buitres, entre otras muchas especies, puede alcanzar unos límites sorprendentes», concluyeron desde Fapas, cuestionando la efectividad de las políticas de conservación del Gobierno de Asturias.