Efecto pantalla: qué es y por qué la DGT ha lanzado esta alerta
La fuerza del viento hace que el coche se desvíe de su trayectoria y el conductor puede reaccionar de forma brusca
España se prepara para el embate de la borrasca Caetano. Según las últimas previsiones de la AEMET, nuestro país se verá azotado por intensas lluvias, copiosas nevadas y vientos huracanados que superarán los 100 kilómetros por hora. Este nuevo episodio meteorológico extremo se suma a un otoño especialmente convulso, con constantes precipitaciones y violentas tormentas que han dejado huella en gran parte del territorio nacional.
La Dirección General de Tráfico alerta sobre un peligro invisible en la carretera: el efecto pantalla. Este fenómeno ocurre cuando, tras pasar un obstáculo como un túnel o un camión, el viento golpea de repente tu vehículo con fuerza, poniendo en riesgo tu seguridad.
¿Qué es el efecto pantalla?
Imagina que estás conduciendo por la carretera y de repente, al salir de un túnel o al adelantar a un camión, sientes una fuerte ráfaga de viento que empuja tu vehículo. Ese es el efecto pantalla.
Este fenómeno ocurre cuando el viento, que ha estado «protegido» por un obstáculo (como un túnel, un muro o un vehículo de gran tamaño), se libera de golpe y choca contra tu coche. Esta fuerza puede ser tan intensa que desestabilice el vehículo y provoque situaciones peligrosas.
¿Por qué es peligroso?
- Pérdida de control: el empuje del viento puede hacer que el coche se desvíe de su trayectoria, especialmente si el conductor reacciona de forma brusca.
- Accidente: si la pérdida de control es significativa, puede provocar que el vehículo colisione con otros vehículos, objetos o incluso salga de la carretera.
- Riesgo para otros conductores: un vehículo descontrolado debido al efecto pantalla puede poner en peligro a otros usuarios de la vía.
¿Cómo evitar el efecto pantalla?
- Antes de entrar en zonas donde se pueda producir el efecto pantalla (túneles, adelantamientos a vehículos grandes), reduce la velocidad para tener mayor control sobre el vehículo.
- Sujeta firmemente el volante: mantén ambas manos en el volante y prepárate para realizar pequeñas correcciones en la dirección si sientes el empuje del viento.
- Evita realizar maniobras bruscas: no aceleres ni frenes de forma brusca, ya que esto puede aumentar la inestabilidad del vehículo.
- Mantén una distancia de seguridad: deja una distancia de seguridad adecuada con respecto a otros vehículos para tener tiempo de reaccionar en caso de que se produzca el efecto pantalla.
- Presta atención a las señales: la DGT suele colocar señales de advertencia en zonas donde el viento puede ser especialmente fuerte.
¿Qué más efectos existen?
- Efecto tijera: este efecto afecta principalmente a vehículos articulados o con remolque. El viento puede hacer que el remolque se desvíe, provocando un movimiento de tijera que puede volcar el conjunto.
- Desviación de la trayectoria: las ráfagas de viento, especialmente las laterales, pueden desviar el vehículo de su trayectoria, llevándolo hacia la mediana, hacia otro vehículo o fuera de la carretera.
- Dificultad para mantener la dirección: el viento puede hacer que sea más difícil mantener el vehículo en línea recta, especialmente a altas velocidades.
- Reducción de la visibilidad: en caso de lluvia o nieve, el viento puede arrastrar partículas que reduzcan la visibilidad y dificulten la conducción.
Qué hacer si te sorprende el efecto pantalla?
- Mantén la calma: lo primero y más importante es no entrar en pánico. La reacción impulsiva puede empeorar la situación.
- Sujeta firmemente el volante: con ambas manos, agarra el volante con fuerza para tener mayor control sobre el vehículo.
- Realiza correcciones suaves: evita movimientos bruscos del volante. Realiza pequeñas correcciones en la dirección para contrarrestar la fuerza del viento.
- Reduce la velocidad gradualmente: si es posible, disminuye la velocidad de forma progresiva para estabilizar el vehículo.
- Evita frenazos bruscos: los frenazos bruscos pueden bloquear las ruedas y provocar una pérdida de control aún mayor.
- No aceleres bruscamente: acelerar bruscamente puede empeorar la situación y hacer que el vehículo sea más inestable.
- Mantén una trayectoria recta: intenta mantener el vehículo en línea recta hasta que la fuerza del viento disminuya.