Los casos importados de malaria se duplican en España
La cifra de personas diagnosticadas con esta enfermedad en el país se encuentra entre las 700 y 800
El número de casos de malaria importados se ha duplicado en España en los últimos diez años. La cifra de personas diagnosticadas se encuentra entre las 700 y 800, pero los especialistas en enfermedades infecciosas advierten de que podría alcanzar las 900 por los casos que no son determinados.
«La malaria es una gran simuladora: se puede presentar con un síntoma respiratorio o gastrointestinal, aunque el cuadro fundamental es la fiebre«, ha comentado el jefe de la Unidad de Referencia Nacional para Enfermedades Tropicales del Hospital Ramón y Cajal, Rogelio López Vélez, en unas jornadas organizadas este miércoles en Madrid.
La vacuna, que ha sido fabricada por la farmacéutica GSK, ha comenzado a utilizarse este lunes en Malawi. Además, será inoculada a 360.000 niños en Kenia y Ghana. Estas medidas forman parte de una estrategia para controlar la enfermedad en los países endémicos. Sin embargo, según ha comentado López Vélez «de momento no es una vacuna para los viajeros internacionales«.
A los investigadores de GKS, que se dedica en exclusiva al descubrimiento de nuevos tratamientos para enfermedades endémicas de países en desarrollo, como la malaria, les gustaría que la vacuna llegara a los pacientes en 2021 o 2022, según han señalado en la jornada. Pero esta no es una cuestión científica y de desarrollo clínico, sino de que las entidades que tienen que financiar esa implementación sean capaces de trabajar conjuntamente.
En España la malaria está erradicada, después de que en 1964 se llevase a cabo una campaña para acabar con el vector infectado del género Anopheles, y los únicos casos que se registran son los importados. Estos no solo han aumentado en nuestro país, sino que se ha detectado un repunte en todo el mundo durante el último año. La causa de este incremento se debe, según Laura Sanz, gerente del grupo de Biología de la Unidad de Malaria del centro de GSK, a que se podrían haber relajado las medidas antimaláricas. Además, también han aparecido resistencias al medicamento en zonas endémicas como Camboya o Vietnam.
Javier Gamo, director de Biología de la Unidad de Malaria de GSK, ha comentado que si la vacuna resultase efectiva «sería un arma muy importante, porque las vacunas siempre han jugado un papel fundamental en la erradicación de las enfermedades infecciosas». Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que la malaria causa 435.000 muertes anuales, el 60% de las cuales afecta a niños menores de cinco años que residen mayoritariamente en el África subsahariana. Esta enfermedad es, según López Vélez, uno de los grandes enemigos de la humanidad, un grave limitador del desarrollo y de la economía de estas regiones», informa Efe.