La NASA detecta la evidencia más clara hasta ahora de posible vida antigua en Marte
El robot Perseverance identifica una posible biofirma que sugiere actividad biológica pasada

Fotos de la misión Mars Rover de la NASA. | NASA
La NASA ha anunciado el descubrimiento de «la señal más clara de vida antigua en Marte» en una roca muestreada por su rover Perseverance el año pasado. La muestra, llamada «Sapphire Canyon», se recolectó en julio de 2024 de un conjunto de afloramientos rocosos en los bordes del valle de Neretva, un valle fluvial excavado por el agua que se precipitó hacia el cráter Jezero hace mucho tiempo. El hallazgo se publica en la revista Nature.
«Hace un año encontramos lo que creemos que son signos de vida microbiana en la superficie de Marte. Así que los pusimos en manos de nuestros científicos para analizarlos y preguntarles si creían que estos eran signos de antigua vida en Marte. Tras un año de revisión, nos han dicho que no pueden encontrar otra explicación, con lo que esta seria la señal más clara de vida que nunca antes hemos encontrado en Marte», declaró el administrador en funciones de la NASA, Sean Duffy, en rueda de prensa.
Se trata de la muestra marciana número 25 recolectada por Perseverance, extraída de una roca rica en vetas llamada «Cheyava Falls». Esta roca, con forma de punta de flecha, fue localizada en la formación «Bright Angel».
En términos técnicos, la «posible biofirma» anunciada este 10 de septiembre por la NASA es una sustancia o estructura que podría tener un origen biológico, pero que requiere más datos o estudios adicionales antes de poder concluir sobre la ausencia o presencia de vida.
«La combinación de compuestos químicos que encontramos en la formación Bright Angel podría haber sido una rica fuente de energía para el metabolismo microbiano», afirmó Joel Hurowitz, científico de Perseverance, de la Universidad de Stony Brook, Nueva York, y autor principal del artículo. «Pero el hecho de que observáramos todas estas convincentes firmas químicas en los datos no significaba que tuviéramos una posible biofirma. Necesitábamos analizar su significado».
Manchas de colores
Los primeros en recopilar datos sobre esta roca fueron los instrumentos PIXL (Instrumento Planetario para Litoquímica de Rayos X) y SHERLOC (Escaneo de Entornos Habitables con Raman y Luminiscencia para Orgánicos y Químicos) de Perseverance. Mientras investigaban Cheyava Falls, de dimensiones de 1 metro por 0,6 metros, encontraron lo que parecían ser manchas de colores. Estas manchas podrían haber sido dejadas por la vida microbiana si esta hubiera utilizado sus ingredientes básicos, el carbono orgánico, el azufre y el fósforo, como fuente de energía.
En imágenes de mayor resolución, los instrumentos detectaron un patrón distintivo de minerales dispuestos en frentes de reacción (puntos de contacto donde ocurren reacciones químicas y físicas), que el equipo denominó manchas de leopardo. Las manchas presentaban la firma de dos minerales ricos en hierro: vivianita (fosfato de hierro hidratado) y greigita (sulfuro de hierro). La vivianita se encuentra frecuentemente en la Tierra en sedimentos, turberas y alrededor de materia orgánica en descomposición. De forma similar, ciertas formas de vida microbiana en la Tierra pueden producir greigita.
La combinación de estos minerales, que parecen haberse formado mediante reacciones de transferencia de electrones entre el sedimento y la materia orgánica, constituye una posible huella de la vida microbiana, que utilizaría estas reacciones para producir energía para su crecimiento. Los minerales también pueden generarse abióticamente, es decir, sin la presencia de vida. Por lo tanto, existen maneras de producirlos sin reacciones biológicas, incluyendo altas temperaturas sostenidas, condiciones ácidas y la unión mediante compuestos orgánicos. Sin embargo, las rocas de Bright Angel no muestran evidencia de haber experimentado altas temperaturas ni condiciones ácidas, y se desconoce si los compuestos orgánicos presentes habrían sido capaces de catalizar la reacción a bajas temperaturas.
Según la NASA, El descubrimiento fue particularmente sorprendente porque involucra algunas de las rocas sedimentarias más jóvenes que la misión ha investigado. Una hipótesis anterior suponía que los signos de vida antigua se limitarían a formaciones rocosas más antiguas.
Este hallazgo sugiere que Marte podría haber sido habitable durante un período más largo o posterior en la historia del planeta de lo que se creía, y que las rocas más antiguas también podrían albergar signos de vida que son simplemente más difíciles de detectar, afirman los científicos de la agencia espacial.
El rover Perseverance ha recolectado y sellado 28 muestras científicamente seleccionadas dentro de tubos prístinos como parte de la campaña de Retorno de Muestras de Marte. La siguiente etapa es traerlas a la Tierra para su estudio.