Adif retira los vagones que había arrojado al río Sil

Este lunes han concluido las labores de retirada de los vagones en la ribera del Sil por parte de la entidad pública Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias), cinco días después de que trabajadores de la empresa los arrojasen al río.

En contexto: los vagones arrojados al río pertenecían a un tren de mercancías que había descarrilado el 28 de julio en Carballeda de Valdeorras (Orense). Esta acción (que fue grabada y subida a las redes sociales) conllevó multitud de críticas, tanto por parte de grupos ecologistas como de partidos políticos. Adif trató de minimizar la gravedad de su acción señalando que los trenes no contenían mercancías, con lo cual no existiría riesgo de contaminación ni vertido, obviando los daños ambientales que pudieran provocar los propios vagones.

Tras hacerse público el vídeo donde se arrojaban los vagones, Adif anunció que abriría una investigación interna para esclarecer lo ocurrido. Este lunes, la entidad ha publicado un mensaje en Twitter en el que asegura que continuarán con la limpieza de la zona y con las labores de reparación de la vía afectada. «De igual forma, se procederá a la restauración del entorno de conformidad con la autorización de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil», han añadido.

Por su parte, la Xunta de Galicia puso en marcha un expediente sancionador contra la empresa pública por una posible infracción grave. Tal y como detallaron en un comunicado, la acción de Adif podría constituir una infracción administrativa grave tipificada en la Ley de residuos y suelos contaminados y en la Ley 10/2008 de residuos de Galicia. La Xunta ha exigido explicaciones al Gobierno tras la publicación del vídeo, en el aprecian que hubo voluntariedad y no se trataría, por tanto, de un hecho accidental.

La consejera de Medioambiente, Vázquez Mejuto, calificó la caída de los vagones de «irresponsabilidad inadmisible» por parte de una administración pública.