'¿Me ayudas?': los canguros saben comunicarse de forma intencionada con los humanos
David Zalubowski | AP
Un estudio de la Universidad de Sidney y de la Universidad de Roehampton en Londres muestra que los canguros son capaces de comunicarse de manera intencionada con los humanos, lo que sugiere que cuentan con una función cognitiva más elevada de lo que se pensaba previamente.
Por qué te lo contamos: las habilidades descubiertas en los canguros se atribuían previamente a animales que han sido domesticados durante siglos, como perros o caballos. Sin embargo, ahora los investigadores creen que no tiene por qué ser una cuestión evolutiva, sino algo que los animales pueden aprender.
En este estudio, los investigadores pusieron a los canguros «una prueba que no se podía solucionar», en este caso, una caja que no se podía abrir con comida dentro. Los animales, en lugar de rendirse al ver que no podían abrirla, se giraban hacia el investigador y de vuelta a la caja, un gesto que es interpretado como una petición de ayuda, según explica la coautora del estudio Alexandra Green.
«Algunos de ellos se acercaron al investigador y empezaron a rascar y olfatear para después mirar otra vez la caja, así que realmente se estaban comunicando con él», afirma Green.
Esta mirada se ha observado en otros animales que piden ayuda a humanos, pero normalmente solo aparece en especies que han sido domesticadas durante siglos, explica el principal autor del estudio, Alan McElligott.
Ahora, con esta investigación, los autores creen que la comunicación entre especies podría darse en cualquier animal con suficiente inteligencia para ello, explica Green.
El estudio se ha hecho a pequeña escala, con solo 11 canguros de diferentes especies, pero es el primero de este tipo que se lleva a cabo con marsupiales, según informa su principal autor.
Green espera que con esta investigación, los australianos ganen más respeto por este animal que es un símbolo del país. Sin embargo, señala que este descubrimiento no significa que la gente deba acercarse más a los canguros en espacios salvajes con comida esperando una comunicación. «Definitivamente, no deberías. Se lee bastante sobre canguros atacando a gente, así que no lo recomendaría».
