El lince ibérico deja de estar en peligro de extinción después de casi cuatro décadas
En 1986 fue declarada en riesgo e incluso en 2002 la situación llegó a considerarse como «crítica»
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) ha acreditado que el lince ibérico ha dejado de ser una especie en peligro de extinción y pasa a catalogarse como especie vulnerable, según ha anunciado este jueves el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno. Fue en 1986 cuando este organismo declaró en peligro de extinción a esta especie tan característica de la península; ahora, casi cuatro décadas después, por fin, deja de estarlo.
La UICN actualizará así la situación del lince ibérico, una especie que en dos décadas ha pasado de apenas un centenar de ejemplares a más de 2.000 individuos y que se ha convertido en un ejemplo para salvaguardar especies en Europa.
De animal «en peligro» a «vulnerable»
En 2002 llegó a ser considerado una especie en «peligro crítico» y en 2015 llegó la esperanza, pues el aumento de ejemplares hizo que la especie pasara a ser catalogada como animal «en peligro» únicamente. Después de años de gran esfuerzo y lucha por hacer frente a la problemática, la Unión internacional para la Conservación de la Naturales ha decidido que la «salud» del lince ha mejorado notablemente y por fin se dan las circunstancias necesarias para que se baje el grado, pasando de «en peligro» a «vulnerable», un hito en la conservación de la especie en nuestro país, que se ha convertido en la primera que desciende dos categorías de amenaza en solo 21 años.
El lince ibérico compartirá categoría con otras especies como el leopardo, el león o la pantera de las nieves. Uno de los motivos que han impulsado este cambio se debe al crecimiento de ejemplares en las últimas décadas. Hace unos meses, los medios de comunicación se hacían eco de otra buena noticia sobre la conservación del lince ibérico. Su población alcanzó los 2.021 ejemplares en 2023, cuando el año anterior no llegaba a 1.700.
Los datos fueron ofrecidos por el proyecto LynxConnect marcaron un nuevo récord y una de las principales misiones de la organización consistía en la liberación de linces. Durante 2023, el proyecto Lynxconnect liberó 34 linces en las áreas de reintroducción creadas en anteriores proyectos Life. procedían tanto de crías en cautividad como de animales silvestres traslocados.
Muertes
Durante 2023 se registraron 189 muertes de linces ibéricos. Como la probabilidad de detectar los ejemplares muertos es muy variables, se trabajó sólo con datos aportados por individuos radiomarcados. Entre las principales causas de muertes destacaron los atropellos, que afectaron al 7% de los linces de la población total.
Esta noticia marca un antes y un después en la lucha por salvar a esta especie que ha estado en peligro de extinción más de dos décadas.