Más de una veintena de muertos, la mayoría niños, en bombardeos contra una escuela en Siria
Aunque la autoría del ataque aún no ha sido confirmada, las agencias Reuters y Europa Press, así como Al Jazeera y la BBC apuntan a fuerzas sirias o rusas, aliados que ya han sido fuertemente criticados por grupos de Derechos Humanos debido a su actuación en suelo sirio, especialmente por sus ataques indiscriminados contra la infraestructura civil. Según ha informado Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos: «Los niños muertos son estudiantes de las escuelas y se cree que los aviones eran rusos». Según declaraciones recogidas por Al Jazeera, un testigo presencial ha informado que el bombardeo se efectuó mientras los menores se disponían a salir del recinto: «cayó un cohete en la entrada de la escuela cuando los estudiantes se estaban a punto de irse a casa, momentos después de que la escuela decidiera poner fin a clases a causa de los ataques en la zona». La localidad de Idlib, donde han tenido lugar los hechos, contiene la mayor área poblada controlada por los rebeldes bajo la bandera del Ejército Libre Sirio (ELS) y de algunas organizaciones islamistas, entre ellas el Frente Fatá al Sham, antigua filial de Al Qaeda. El Ejército sirio con el apoyo de Rusia pretende acabar con la presencia de dichos grupos a toda costa, mientras la Comunidad Internacional intenta lanzar medidas que alivien la masacre. En la jornada de ayer, Reino Unido y Francia pidieron sanciones para Siria por realizar ataques con gas tóxico, y el día de hoy la OTAN ha mostrado su malestar por el repostaje en Ceuta de varios buques de guerra rusos que viajan a Siria.
Al menos 26 civiles, en su mayoría niños, han muerto como consecuencia de ataques aéreos contra un un complejo escolar en la localidad siria de Haas, un pueblo situado en la provincia de Idlib controlado por los rebeldes. Tanto el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos como Defensa Civil han confirmado que un complejo de tres escuelas ha resultado alcanzado en «varios bombardeos» dejando más de una veintena de muertos, casi todos menores.
Aunque la autoría del ataque aún no ha sido confirmada, las agencias Reuters y Europa Press, así como Al Jazeera y la BBC apuntan a fuerzas sirias o rusas, aliados que ya han sido fuertemente criticados por grupos de Derechos Humanos debido a su actuación en suelo sirio, especialmente por sus ataques indiscriminados contra la infraestructura civil. Según ha informado Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos: «Los niños muertos son estudiantes de las escuelas y se cree que los aviones eran rusos». Según declaraciones recogidas por Al Jazeera, un testigo presencial ha informado que el bombardeo se efectuó mientras los menores se disponían a salir del recinto: «cayó un cohete en la entrada de la escuela cuando los estudiantes se estaban a punto de irse a casa, momentos después de que la escuela decidiera poner fin a clases a causa de los ataques en la zona». La localidad de Idlib, donde han tenido lugar los hechos, contiene la mayor área poblada controlada por los rebeldes bajo la bandera del Ejército Libre Sirio (ELS) y de algunas organizaciones islamistas, entre ellas el Frente Fatá al Sham, antigua filial de Al Qaeda. El Ejército sirio con el apoyo de Rusia pretende acabar con la presencia de dichos grupos a toda costa, mientras la Comunidad Internacional intenta lanzar medidas que alivien la masacre. En la jornada de ayer, Reino Unido y Francia pidieron sanciones para Siria por realizar ataques con gas tóxico, y el día de hoy la OTAN ha mostrado su malestar por el repostaje en Ceuta de varios buques de guerra rusos que viajan a Siria.