La policía israelí detiene a 22 ultraortodoxos judíos por abusos sexuales
La policía israelí ha anunciado este lunes el arresto de 22 ultraortodoxos judíos sospechosos de abusos sexuales, en el marco de una macrooperación encubierta en esta comunidad, que intentó disimular los actos de algunos de sus miembros.
La policía israelí ha anunciado este lunes el arresto de 22 ultraortodoxos judíos sospechosos de abusos sexuales, en el marco de una macrooperación encubierta en esta comunidad, que intentó disimular los actos de algunos de sus miembros.
Los 22 hombres, de 20 a 60 años y arrestados por la noche, son sospechosos de haber abusado durante dos años de mujeres y niños en sus comunidades de Jerusalén, de Bnei Brak, de Bet Shemsh y de la colonia de Beital Illit en Cisjordania, territorio palestino ocupado, según han indicado la autoridades. Otros miembros de esta comunidad, que mantiene estrictamente las leyes del judaísmo, lo sabían pero no alertaron a las autoridades, prefiriendo intentar arreglar la situación de manera interna.
Bajo la dirección de sus rabinos, recogieron informaciones sobre los autores de los actos para confundirlos. «En la mayoría de los casos, ordenábamos a los sospechosos tratarse de una manera u otra dentro de la comunidad», ha añadido la policía. Por su parte, «decenas de víctimas no recibieron los tratamientos necesarios». Las autoridedes han terminado manejando pruebas recogidas por otros ultraortodoxos contra los sospechosos. La policía publicó un vídeo mostrando cuadernos de notas utilizados para recoger las informaciones comprometedoras.
En Jerusalén, varios miembros de la comunidad intentaron impedir las detenciones, injuriando a los agentes y lanzando proyectiles que rompieron las ventanas de los coches, según asegura la policía.
Los ultraortodoxos representan casi el 10% de la población israelí y llevan una vida cotidiana en estricta conformidad con las reglas del judaísmo. Los líderes ultraortodoxos ejercen también una gran influencia política.