Un hombre es condenado a 16 años de prisión por matar a 21 gatos
Un hombre ha sido condenado a 16 años de cárcel por matar a 21 gatos en California. Además, este norteamericano se enfrentó previamente a una denuncia por abuso sexual de un gato muerto. Se trata de Robert Roy Farmer, de 26 años, que fue sentenciado el viernes pasado en el Tribunal Superior del Condado de Santa Clara, después de declararse culpable el año pasado de 21 delitos graves de crueldad animal.
Un hombre ha sido condenado a 16 años de cárcel por matar a 21 gatos en California. Además, este norteamericano se enfrentó previamente a una denuncia por abuso sexual de un gato muerto. Se trata de Robert Roy Farmer, de 26 años, que fue sentenciado el viernes pasado en el Tribunal Superior del Condado de Santa Clara, después de declararse culpable el año pasado de 21 delitos graves de crueldad animal.
Según informan los medios locales, los gatos comenzaron a desaparecer del barrio Cambrian Park de San José en septiembre de 2015 y más tarde fueron encontrados muertos. Ese mes, la policía recibió imágenes de vigilancia doméstica de un hombre blanco atrayendo a un gato de la residencia de su propietario antes de agarrar al felino y huir. Las imágenes incitaron a la policía a llevar a cabo «investigaciones de seguimiento» en el secuestro de la mascota.
El 8 de octubre de 2015, Famer, hijo de un capitán retirado del Departamento de Policía de San José, fue encontrado durmiendo dentro de su coche en un parking comercial. La policía registró el vehículo y encontró un gato muerto «escondido dentro del coche”, según una declaración sobre el arresto de Farmer. El interior del vehículo estaba cubierto por trozos de pieles y restos de sangre. La policía también encontró una mochila con un par de guantes cubiertos de piel y un cuchillo de caza en una funda.
Durante el juicio, se presentó como prueba un informe de necropsia de Animal Services que documentaba signos de abuso sexual en el gato muerto dentro del coche, incluyendo los genitales dilatados. El abogado de Farmer negó el argumento de la acusación de que el gato fue abusado sexualmente.
Esta acusación desencadenó en un debate sobre si Farmer debía ser obligado a registrarse como un delincuente sexual al salir de prisión. No obstante, el juez decidió no exigir al acusado que se inscribiera como delincuente sexual. Sin embargo, le ordenó mantenerse alejado de los gatos durante 10 años después de su liberación de prisión, así como de la localidad donde cometió los delitos.