Alemania prohíbe los relojes inteligentes para niños por espionaje
En octubre, la Organización Europea del Consumidor emitió un aviso advirtiendo a los padres sobre la gran cantidad de defectos de seguridad presentes en los relojes inteligentes dirigidos a niños, y sugirió que no se compren ni se usen. Ahora, Alemania eleva esa advertencia a prohibición, vetando su uso en el país.
En octubre, la Organización Europea del Consumidor emitió un aviso advirtiendo a los padres sobre la gran cantidad de defectos de seguridad presentes en los relojes inteligentes dirigidos a niños, y sugirió que no se compren ni se usen. Ahora, Alemania eleva esa advertencia a prohibición, vetando su uso en el país.
La vulnerabilidad de este tipo de dispositivos, que pueden ser fácilmente hackeados, ha disparado las alarmas. La agencia de telecomunicaciones alemana no sólo los ha prohibido, sino que ha pedido a los padres que los destruyan.
Los micrófonos en cada reloj inteligente tienen el potencial de convertirse en dispositivos de escucha clandestinos o de permitir que personas desconocidas se comuniquen con los niños sin el conocimiento de sus padres. Por eso, la organización europea emitió ese aviso hace unas semanas.
No obstante, la agencia alemana está más preocupada por el propio espionaje de los padres a los hijos que por cualquier injerencia extraña. Estos smartwatches, dirigidos a menores entre 5 y 12 años, incluyen una función de supervisión como por ejemplo la que usan los dispositivos para controlar a los bebés, con el añadido de que llevan incorporada una tarjeta SIM. Con una aplicación en su teléfono, los padres pueden controlar el reloj y pueden hacer que llame a un número de teléfono arbitrario, sin que su hijo lo sepa. Esto permite a los padres escuchar las conversaciones de sus hijos y de su entorno sin que nadie se dé cuenta.
La Agencia Federal de la Red ha aconsejado en particular a los colegios que estén encima de los relojes de sus alumnos. Sobre todo a aquellos que incorporan esta función de supervisión. Los padres podrían, incluso, activar el micrófono para escuchar las clases que imparten los maestros, algo que está totalmente prohibido. La agencia germana ha concluido que estos son dispositivos no autorizados por espionaje.