Monsanto, condenada a pagar 2.000 millones de dólares por su herbicida con glifosato
A esta indemnización de 1.000 millones de dólares por persona se suman otros 55 concedidos a la pareja, Alberta y Alva Pilliod
Un jurado de California ha condenado a Monsanto, propiedad de Bayer, a pagar 2.000 millones de dólares a una pareja estadounidense enferma de cáncer, lo que atribuyen al herbicida Roundup.
A esta indemnización de 1.000 millones de dólares por persona se suman otros 55 concedidos a la pareja, Alberta y Alva Pilliod, como compensación por las pérdidas económicas y el perjuicio moral.
“El jurado vio por sí mismo los documentos internos de la compañía que demostraban que, desde el primer día, Monsanto nunca tuvo interés en averiguar si Roundup era seguro”, ha dicho uno de los abogados de los demandantes, Brent Wisner. “En lugar de invertir en ciencia sólida, invirtieron millones en atacar a la ciencia que amenazaba su agenda comercial”, ha añadido.
Bayer se ha mostrado “decepcionada” con la sentencia judicial y ha anunciado su intención de recurrirla, argumentando que difiere con una reciente revisión de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos sobre herbicidas con glifosato.
«El consenso entre los principales reguladores de salud en todo el mundo es que los productos a base de glifosato se pueden usar de manera segura y que el glifosato no es cancerígeno«, sostiene la compañía.
Esta sentencia es la última de una serie de derrotas judiciales de Monsanto por este herbicida con glifosato, a pesar de que la empresa sigue asegurando que no es cancerígeno.
El juicio comenzó a finales de marzo, justo después de que Monsanto fuera condenada a pagar 80 millones de dólares, por el mismo motivo, a un hombre con un linfoma que achacaba también al herbicida Roundup. En esa ocasión, el jurado consideró que la empresa debería haber avisado sobre los posibles peligros de su producto.
En agosto de 2018, Monsanto fue condenada a pagar 289 millones de dólares a un jardinero afectado por el mismo tipo de cáncer, una cantidad que un juez redujo luego a 78 millones.
«A diferencia de los dos primeros juicios de Monsanto, donde los jueces limitaron severamente la cantidad de evidencia de los demandantes, finalmente se nos ha permitido mostrar a un jurado la montaña de evidencia que muestra la manipulación de la ciencia, los medios y las agencias reguladoras de Monsanto para mantener su propia agenda a pesar del daño severo del Roundup al reino animal y la humanidad», ha dicho el abogado Michael Miller, compañero de Wisner.