El jurado popular encuentra culpable a Ana Julia Quezada de matar a Gabriel con alevosía
El jurado la encuentra también culpable de dos delitos de daños psíquicos a los padres del niño, Ángel Cruz, entonces su pareja, y Patricia Rodríguez
El jurado popular que juzgaba a Ana Julia Quezada, la única acusada por la muerte del niño Gabriel Cruz, desde el 9 de septiembre la encuentra culpable de matar al pequeño de manera voluntaria, con alevosía pero sin ensañamiento. «Ana Julia mató a Gabriel de forma sorpresiva y repentina, sin posibilidad de defensa por parte del menor», han dicho en la lectura del veredicto.
Además, el jurado, formado por siete mujeres y dos hombres, la encuentra culpable, por unanimidad, de dos delitos de daños psíquicos a los padres del niño, Ángel Cruz, entonces su pareja, y Patricia Rodríguez. Por estos delitos, la Fiscalía solicita penas individuales de cinco años de prisión.
El jurado ha descartado el ensañamiento que pedía la acusación particular que representa a la familia por no considerarlo probado, de la misma manera que ha descartado la premeditación del asesinato, pues considera que la acusada mató al niño en un arrebato.
El jurado, que ha deliberado durante más de 24 horas, ha emitido así un veredicto que se ajusta al relato de la fiscal Elena María Fernández, que pide prisión permanente revisaba para Ana Julia Quezada por un delito de asesinato con alevosía.
A la lectura del veredicto, en la que la letrada de la administración de Justicia Isabel Bru ha leído las 142 preguntas hechas al jurado, han asistido los padres del pequeño, la madre acompañada de su psicólogo.
La madre de Gabriel ha celebrado que han «conseguido justicia por Gabriel» y ha agradecido el nombre del jurado. Además ha agradecido «el excelente trabajo realizado por el equipo de abogados, así como psicólogos y todas las personas que nos han acompañado». Ha agradecido también a los periodistas «que han firmado un pacto ético» y ha dicho que espera «que nunca más se hable de esta mujer».
El padre del pequeño, por su parte, ha dicho que «los psicópatas tienen que estar encerrados», en referencia a Ana Julia Quezada, de quien ha celebrado que no vaya «a hacer más daño a nadie».
Quezada, que mantenía una relación sentimental con el padre de Gabriel cuando ocurrieron los hechos, fingió participar activamente en su búsqueda cuando se dio por desaparecido, a pesar de que le había quitado la vida el día de su desaparición, el 27 de febrero de 2018, en una finca de campo en Almería. El cadáver fue encontrado en su automóvil tras 12 días de búsqueda, lo que causó una gran conmoción en toda España.
La acusada ha reconocido durante el juicio que mató al pequeño, pero asegura que no de manera premeditada, por lo que se declara inocente y su defensa pide 15 años de prisión por el delito de homicidio imprudente.