Una negligencia humana mata a otro gorila en peligro de extinción en México
La Dirección General de Zoológicos y Vida Silvestre de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) del Gobierno de la Ciudad de México confirmó el fallecimiento de Bantú, el único gorila de tierras bajas occidentales del Zoológico de Chapultepec, que iba a ser trasladado al Zoológico de Guadalajara, donde se reproduciría con dos hembras de ese lugar. «Falleció al despertar», explicaron las autoridades del zoológico de la capital. Bantú era el único gorila macho del país, pesaba 200 kilos y medía 1,70. La muerte de este simio se suma al caso de Harambe, el gorila de 17 años que fue abatido a tiros por miembros del zoológico de Cincinnati el pasado mayo tras caer en su foso un niño de 4 años. Estos casos ponen en tela de juicio el cuidado que se presta a estos animales en peligro de extinción. La organización ecologista WWF calcula que sólo quedan cerca de 800 ejemplares. Una desaparición irreversible por culpa de la caza masiva que ha sufrido este animal durante décadas, que ha acabado por arrinconarle en el triángulo de montañas y volcanes de Congo, Ruanda y Uganda.
La muerte de otro animal en peligro de extinción por culpa del hombre vuelve a despertar una oleada de críticas. En este caso una posible negligencia ha acabado con la vida de Bantú, un gorila macho de 24 años nacido en cautividad en el zoológico del Bosque Chapultec, en Ciudad de México. El simio sufrió una parada cardiorespiratoria cuando estaba sedado en el transcurso de un traslado. Se ha iniciado una investigación para determinar qué pudo fallar.
La Dirección General de Zoológicos y Vida Silvestre de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) del Gobierno de la Ciudad de México confirmó el fallecimiento de Bantú, el único gorila de tierras bajas occidentales del Zoológico de Chapultepec, que iba a ser trasladado al Zoológico de Guadalajara, donde se reproduciría con dos hembras de ese lugar. «Falleció al despertar», explicaron las autoridades del zoológico de la capital. Bantú era el único gorila macho del país, pesaba 200 kilos y medía 1,70.
La muerte de este simio se suma al caso de Harambe, el gorila de 17 años que fue abatido a tiros por miembros del zoológico de Cincinnati el pasado mayo tras caer en su foso un niño de 4 años. Estos casos ponen en tela de juicio el cuidado que se presta a estos animales en peligro de extinción. La organización ecologista WWF calcula que sólo quedan cerca de 800 ejemplares. Una desaparición irreversible por culpa de la caza masiva que ha sufrido este animal durante décadas, que ha acabado por arrinconarle en el triángulo de montañas y volcanes de Congo, Ruanda y Uganda.