Luz verde del Senado de Brasil para iniciar la destitución de Dilma Rousseff
En una sesión maratoniana celebrada en el Senado, el presidente del Tribunal Supremo, Ricardo Lewandowski, recordó a los parlamentarios antes del inicio que estaban a punto de «ejercer una de las tareas más trascendentales recogidas por la Constitución». El Senado había suspendido el pasado 12 de mayo a Rousseff, acusada de prácticas ilegales continuadas en la gestión del presupuesto para enmascarar el desplome de la economía. Rousseff ha negado desde el principio las acusaciones y ha calificado su destitución de golpe de Estado. Tras la votación del miércoles, el juicio político comenzará el 25 de agosto, cuatro días después de que acaben los Juegos Olímpicos, y finalizará cinco días después con una votación. Si Rousseff es destituida, Michel Temer asumirá el puesto de presidente hasta las elecciones de 2018. Temer, que en su día fue compañero de partido antes de convertirse en su principal opositor.
Con 51 votos a favor y 21 en contra, el Senado de Brasil ha aprobado continuar con el procesamiento político que, previsiblemente, acabará con la destitución de la presidenta del país Dilma Rousseff. El motivo es una presunta ilegalidad en la gestión de los presupuestos.
En una sesión maratoniana celebrada en el Senado, el presidente del Tribunal Supremo, Ricardo Lewandowski, recordó a los parlamentarios antes del inicio que estaban a punto de «ejercer una de las tareas más trascendentales recogidas por la Constitución». El Senado había suspendido el pasado 12 de mayo a Rousseff, acusada de prácticas ilegales continuadas en la gestión del presupuesto para enmascarar el desplome de la economía. Rousseff ha negado desde el principio las acusaciones y ha calificado su destitución de golpe de Estado.
Tras la votación del miércoles, el juicio político comenzará el 25 de agosto, cuatro días después de que acaben los Juegos Olímpicos, y finalizará cinco días después con una votación. Si Rousseff es destituida, Michel Temer asumirá el puesto de presidente hasta las elecciones de 2018. Temer, que en su día fue compañero de partido antes de convertirse en su principal opositor.
