Máquinas más finas que un cabello, Premio Nobel de Química 2016
La Academia ha indicado en un comunicado que el trabajo de los tres investigadores «demuestra cómo la miniaturización de la tecnología puede conducir a una revolución» y cómo esa revolución «ha llevado la química a una nueva dimensión». El trabajo de Sauvage, Stoddart y Feringa, premiado con los 850.000 euros del Nobel, ha demostrado que es posible crear máquinas 1.000 veces más finas que el grosor de un cabello, cuyas funciones son inimaginables. Los investigadores han desarrollado moléculas con movimientos controlables, que pueden llevar a cabo tareas cuando se les proporciona energía. Como es tradición, el Nobel de Química se ha anunciado el miércoles de la primera semana de octubre y es el tercero que se da a conocer. El lunes se hizo público el de Medicina, que se ha concedido al japonés Yoshinori Ohsumi por haber descubierto cómo las células eliminan y reciclan sus residuos con el mecanismo de la autofagia. Y ayer se anunció la concesión del de física a los británicos David Thouless, Duncan Haldane y Michael Kosterlitz por sus trabajos teóricos sobre las transiciones de fase topológica
Imaginemos que en un futuro, robots diminutos puedan inyectarse en las venas para atacar a las células cancerosas. Ese futuro no es tan lejano gracias al trabajo desarrollado por los investigadores Jean-Pierre Sauvage, Fraser Stoddart y Bernard Feringa, que hoy ha sido galardonado con el premio Nobel de Química. La Real Academia de las Ciencias Sociales de Suecia les ha reconocido por «diseñar y producir máquinas moleculares».
La Academia ha indicado en un comunicado que el trabajo de los tres investigadores «demuestra cómo la miniaturización de la tecnología puede conducir a una revolución» y cómo esa revolución «ha llevado la química a una nueva dimensión». El trabajo de Sauvage, Stoddart y Feringa, premiado con los 850.000 euros del Nobel, ha demostrado que es posible crear máquinas 1.000 veces más finas que el grosor de un cabello, cuyas funciones son inimaginables. Los investigadores han desarrollado moléculas con movimientos controlables, que pueden llevar a cabo tareas cuando se les proporciona energía.
Como es tradición, el Nobel de Química se ha anunciado el miércoles de la primera semana de octubre y es el tercero que se da a conocer. El lunes se hizo público el de Medicina, que se ha concedido al japonés Yoshinori Ohsumi por haber descubierto cómo las células eliminan y reciclan sus residuos con el mecanismo de la autofagia. Y ayer se anunció la concesión del de física a los británicos David Thouless, Duncan Haldane y Michael Kosterlitz por sus trabajos teóricos sobre las transiciones de fase topológica