Una explosión ocurrida en el baño de mujeres del segundo piso del Centro Comercial Andino en la Zona Rosa de Bogotá ha dejado al menos tres víctimas fatales y el número de heridos asciende a nueve, según información de medios locales.
El alcalde Enrique Peñalosa ha calificado el hecho de «ataque terrorista» y ha confirmado que una mujer de 23 años, de nacionalidad francesa, llamada Julie Huynh, ha fallecido a causa de la explosión. Bomberos y antiexplosivos se han trasladado al lugar para atender la emergencia.
Las otras dos víctimas, de nacionalidad colombiana, son Ana María Gutiérrez, de 27 años, y Lady Paola Jaimes Ovalle, de 31 años, quienes, según han confirmado representantes de la Clínica del Country a la que fueron trasladadas, han muerto «como consecuencia de las lesiones sufridas», explica el diario local El Tiempo.
El presidente Juan Manuel Santos primero ha expresado su solidaridad con las víctimas a través de Twitter y un par de horas más tarde, en otro tuit, también ha calificado el incidente de «atentado».
Mi más enérgica condena al atentado en CC Andino. Regresando a Bogotá en este momento para ponerme al frente de la situación.
— Juan Manuel Santos (@JuanManSantos) June 18, 2017
Tanto las FARC como el Ejército de Liberación Nacional (ELN), con las que el Gobierno ha llevado a cabo procesos de paz, han rechazado la autoría del atentado. El jefe máximo de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri, alias «Timochenko», ha expresado a través de Twitter su solidaridad con las víctimas y ha advertido que «dicho acto solo puede venir de quienes quieren cerrar los caminos de la paz y la reconciliación».
Respecto al ELN, también ha señalado a través de Twitter que «hay quienes pretenden así hacer trizas los procesos de paz». Además, ha calificado el atentado de «execrable» y ha pedido al Estado que investigue para «indentificar a los responsables».
Santos ha afirmado que aún «no hay indicios claros sobre quién puede haber sido el responsable» del atentado, pero ha asegurado que «este domingo realizaremos un Consejo de Seguridad para evaluar pasos adicionales que permitan garantizar la tranquilidad de Bogotá».
Las guerrillas han calificado este suceso como un intento de obstaculizar el proceso de paz, pero Santos ha advertido de que «los que quieren aguar la fiesta de la paz no van a tener éxito, y si esto es una manifestación en ese sentido, tengan la absoluta seguridad que a esos enemigos de la paz los vamos a perseguir sin treguan ni cuartel».