El Supremo venezolano otorga tareas de fiscal al defensor del pueblo
El Supremo de Venezuela ha emitido una sentencia difundida este miércoles que señala que el defensor del pueblo, Tarek William Saab, puede tener acceso a todos los actos de investigación que cursen en el Ministerio Público y solicitar la realización de análisis forenses, entre otras atribuciones de fiscal. La decisión surge después de que el jefe de Estado, Nicolás Maduro, haya cuestionado la actuación de la fiscal general, Luisa Ortega, en las protestas que se iniciaron el 1 de abril y que ya han dejado 76 muertos y más de un millar de heridos.
El Supremo de Venezuela ha emitido una sentencia difundida este miércoles que señala que el defensor del pueblo, Tarek William Saab, puede tener acceso a todos los actos de investigación que cursen en el Ministerio Público y solicitar la realización de análisis forenses, entre otras atribuciones de fiscal. La decisión surge después de que el jefe de Estado, Nicolás Maduro, haya cuestionado la actuación de la fiscal general, Luisa Ortega, en las protestas que se iniciaron el 1 de abril y que ya han dejado 76 muertos y más de un millar de heridos.
En el fallo, se indica que la Defensoría del Pueblo «puede promover pruebas, solicitar a los órganos auxiliares de justicia que se realicen diligencias de investigación, tales como: realización de experticias, levantamientos planimétricos, reconstrucción de hechos o autopsias, entre otras». Además, la Defensoría tiene la potestad de estar presente «en todas las audiencias y cualquier acto de investigación del proceso penal ordinario y penal militar, incluidas las pruebas anticipadas, audiencias preliminares y de juicio», todo ello, «de manera autónoma».
Asimismo, en el fallo se señala que el defensor «ostenta amplia competencia constitucional para la promoción, defensa y vigilancia de los derechos humanos» y que «en el ejercicio legítimo del mismo, está facultado para iniciar una investigación, así como para tener acceso a las actuaciones judiciales y administrativas relacionadas».
Todo ello «cuando se trate de la violación a los derechos humanos y de esta derive la comisión de un hecho punible», aunque se aclara que esta tarea se cumple «sin que ello menoscabe el marco de actuación del Ministerio Público».
La decisión se produce dos semanas después de que Saab solicitara al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) aclarar las competencias del organismo que él dirige para participar en las investigaciones que lleva a cabo la Fiscalía por casos de violaciones de derechos humanos. El defensor ha considerado, al introducir el recurso, que es una «cualidad inherente» de la Defensoría del Pueblo «investigar las violaciones de derechos humanos» y aseguró que ha habido «una interpretación libre» de la Constitución por parte de la Fiscalía que, en ocasiones, ha impedido la participación de la institución.
Saab ha asegurado no tener duda respecto a las facultades de la Defensoría del Pueblo, sin embargo, ha considerado que es «sano para la democracia» que el Supremo aclare si en efecto esta institución puede «abrir investigación y tener acceso a las actuaciones que conforman la misma cuando exista la violación de un derecho humano».
Por su parte, la fiscal Luisa Ortega ha reiterado que la acción penal es una competencia exclusiva del Ministerio Público y, con base en ello, ha desmentido versiones del Ejecutivo sobre el origen de algunos de los hechos violentos suscitados en medio de las protestas y ha criticado la intervención de tribunales militares en estos sucesos, informa Efe.
El TSJ también ha declarado esta semana inadmisible el recurso de nulidad interpuesto por la Fiscalía contra las bases comiciales de la Constituyente y ha declarado nulos los actos del vicefiscal general de ese país debido a irregularidades en su designación. El pasado 15 de junio la fiscal general, Luisa Ortega Díaz, presentó dos recursos de nulidad contra los decretos presidenciales mediante los cuales se convocó a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) y se establecieron sus bases electorales.
La fiscal se ha distanciado del Gobierno en los últimos meses al denunciar la ruptura del hilo constitucional por parte del Supremo y, luego, al rechazar la intención del jefe de Estado de cambiar la Carta Magna, informa el diario venezolano El Estímulo.