El CGPJ se prepara para trabajar en funciones tras fracasar el pacto político
Los 20 vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), presididos por Carlos Lesmes, se preparan ya para continuar su trabajo en funciones después de que se rompiera el acuerdo político para renovar ese órgano para el 4 de diciembre, cuando expira su actual mandato. Distintos vocales consultados por Efe reconocen que, aunque en esta ocasión llegaron a creer que iban a acabar su trabajo en el plazo marcado al ver la negociación entre el Gobierno y el PP, la previsible prórroga no se ha recibido con mucha sorpresa en un órgano acostumbrado a tener que esperar.
Los 20 vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), presididos por Carlos Lesmes, se preparan ya para continuar su trabajo en funciones después de que se rompiera el acuerdo político para renovar ese órgano para el 4 de diciembre, cuando expira su actual mandato. Distintos vocales consultados por Efe reconocen que, aunque en esta ocasión llegaron a creer que iban a acabar su trabajo en el plazo marcado al ver la negociación entre el Gobierno y el PP, la previsible prórroga no se ha recibido con mucha sorpresa en un órgano acostumbrado a tener que esperar.
«Ha sido una constante histórica«, explica a Efe uno de los actuales vocales, que señala que los miembros del Consejo asumen con total naturalidad su continuidad y se disponen a reorganizar sus agendas, ya que el último pleno de este Consejo estaba fijado para el próximo 29 de noviembre. La duda ahora es «hasta cuándo», apunta otro vocal, que ve complicado un acuerdo antes de que se celebren elecciones generales y se constituya un nuevo Parlamento.
Los populares rompieron el pacto que habían negociado con el Gobierno después de que el magistrado Manuel Marchena, nombre consensuado para presidir el CGPJ, renunciara al cargo reivindicando su independencia. Poco antes se había filtrado un mensaje enviado por el portavoz en la Cámara Alta, Ignacio Cosidó, a los senadores de su grupo defendiendo un acuerdo que no había gustado a muchos compañeros y que, señalaba, permitiría controlar «desde detrás» la sala segunda del Tribunal Supremo.
Retomar en breve las negociaciones parece imposible, máximo cuando el PP reclama ahora cambiar el sistema de elección del CGPJ para que sean los propios jueces y magistrados los que designen a la mayoría de los vocales, modelo que rechaza el Gobierno defendiendo la participación en el proceso del Parlamento, donde reside la soberanía popular.
Fuentes del Ejecutivo reprochan al PP que con su actitud impidan regenerar a un órgano «imprescindible» para el funcionamiento del Estado de derecho y mantengan al frente del CGPJ y del Supremo a Carlos Lesmes, una figura que no gusta ni a populares ni a socialistas y cuestionada tras la gestión que realizó el alto tribunal del caso del impuesto de las hipotecas.
La imagen afectada por lo sucedido ha sido la del Supremo, pero no la del Consejo, señala un vocal confiando en que las próximas negociaciones sean diferentes y «no se asalte a otro poder, como ha sucedido en esta ocasión».
Desde el CGPJ se reconoce que el bloqueo no es bueno desde el punto de vista institucional y se recuerda que ese organismo ha cumplido con su papel en el proceso de renovación al enviar al Congreso y al Senado el listado de los jueces y magistrados candidatos a vocal que han sido avalados por sus compañeros y por las asociaciones profesionales. Al menos uno de ellos, el magistrado de la Audiencia Provincial de Barcelona Luis Rodríguez Vega, ha pedido que se retire su nombre de esa lista. Si no se reforma el sistema de elección de los vocales, explican fuentes jurídicas, será de esa lista de donde salgan los 12 vocales de extracción judicial el día en el que los partidos políticos sean capaces de llegar a un acuerdo.