Demuestran con moscas que la frustración sexual puede acelerar la evolución
Integrantes del Instituto Cavanilles de la Universitat de València han desarrollado un modelo matemático que demuestra que los costes fisiológicos de la frustración sexual pueden acelerar la evolución, y han puesto esa idea a prueba experimentalmente en la mosca del vinagre Drosophila melanogaster.
Integrantes del Instituto Cavanilles de la Universitat de València han desarrollado un modelo matemático que demuestra que los costes fisiológicos de la frustración sexual pueden acelerar la evolución, y han puesto esa idea a prueba experimentalmente en la mosca del vinagre Drosophila melanogaster.
Según informa la UV, este trabajo es obra de Roberto García-Roa, primer autor y principal responsable del estudio; Manuel Serra, coautor del estudio, y Pau Carazo, director del trabajo, y ha sido publicado por la revista Proceedings of the Royal Society B: Biological Sciences.
El estudio muestra que en la mosca del vinagre la frustración sexual acelera el envejecimiento reproductivo y cuando un macho de esta especie detecta la presencia de una hembra, se ponen en marcha mecanismos fisiológicos que lo preparan para competir contra otros machos y reproducirse.
En esta situación, si un macho que percibe constantemente la presencia de hembras reproductivas no consigue aparearse frecuentemente, esas expectativas frustradas tienen consecuencias negativas colaterales, ya que estos machos envejecen mucho más rápido y su éxito reproductivo se ve reducido dramáticamente, en torno a un 25 %.
García-Roa ha apuntado que «a escala humana, esto supone una reducción de unos ocho años de vida y tener un descendiente menos por cada cuatro». «Estos costes afectarán fundamentalmente a los peores machos de una población, aquellos que ya de por sí tienen más dificultades para aparearse, y por tanto hará que la evolución favorezca con mayor intensidad a los machos de más calidad», ha continuado. Para el responsable del estudio, esto supone que se intensifique la selección sexual «ya que acelerará la evolución de cualquier carácter que permita a los machos ser mejores competidores».
Aunque de momento se ha estudiado en pocas especies, los mecanismos fisiológicos de este tipo de envejecimiento parecen muy arraigados, lo que hace suponer que podría tratarse de un fenómeno extendido entre los animales.
Serra, que también es catedrático del departamento de Microbiología y Ecología de la UV, ha apuntado que determinar la intensidad de la evolución por selección darwiniana «es crucial para explicar cómo las poblaciones logran un ajuste entre sus genes y las condiciones del ambiente y cómo se da la divergencia genética entre poblaciones».
Por su parte, Carazo ha indicado que «además de ser uno de los principales motores de la evolución, la selección sexual puede tener consecuencias muy positivas para las poblaciones, incrementando su viabilidad y su capacidad para adaptarse a un ambiente cambiante».