Amazon renuncia a construir una sede en Nueva York
El gigante estadounidense del comercio electrónico Amazon ha dejado de lado su proyecto de construir una sede en Nueva York debido a la oposición de distintos políticos de la ciudad, ha anunciado la compañía en un comunicado. «Mientras las encuestas muestran que el 70% de los neoyorquinos respalda nuestros planes e inversiones, una cierta cantidad de políticos locales ha dejado claro que se opone a nuestra presencia y que no trabajará con nosotros para construir el tipo de relación requerida para continuar con este proyecto», lamenta la comapía capitaneada por el multimillonario Jeff Bezos, poseedor de la mayor fortuna del mundo, según la revista Forbes.
El gigante estadounidense del comercio electrónico Amazon ha dejado de lado su proyecto de construir una sede en Nueva York debido a la oposición de distintos políticos de la ciudad, ha anunciado la compañía en un comunicado. «Mientras que las encuestas muestran que el 70% de los neoyorquinos respalda nuestros planes e inversiones, una cierta cantidad de políticos locales ha dejado claro que se opone a nuestra presencia y que no trabajará con nosotros para construir el tipo de relación requerida para continuar con este proyecto», lamenta la compañía capitaneada por el multimillonario Jeff Bezos, poseedor de la mayor fortuna del mundo, según la revista Forbes.
Amazon, firma en pleno crecimiento cuya sede central se encuentra en Seattle, había anunciado en noviembre que construiría dos nuevas sedes, una en Nueva York y otra a las afueras de Washington. El proyecto de este nuevo cuartel general de Amazon en Long Island City, Queens, que -según la compañía- habría creado 25.000 empleos de haberse llevado a cabo, provocó duras críticas por parte de distintos representantes locales, especialmente por las ventajas fiscales prometidas y los efectos sobre el barrio, informa AFP. Inicialmente, la empresa había planeado construir un complejo en la ciudad a cambio de 3.000 millones de dólares (más de 2.600 millones de euros) en incentivos locales y estatales, algo que no sentó bien a distintos políticos neoyorkinos, que no veían con buenos ojos que se dieran tantas ventajas a una compañía con tantos recursos.
Amazon, que se ha mostrado «decepcionada por haber llegado a esta conclusión», ha asegurado que, para la empresa, «el compromiso con la construcción de una nueva sede requiere relaciones positivas y colaborativas con funcionarios electos locales y estatales que apoyen [a la empresa] a largo plazo». El gigante del comercio electrónico ha precisado que no reabrirá el proceso de licitación, pero que «procederá según lo planeado» con las sedes en Virginia y un centro logístico en Nashville, Tennessee.
La decisión de Amazon supone un revés para el gobernador Andrew Cuomo y el alcalde Bill de Blasio, ambos demócratas, que habían dedicado esfuerzos conjuntos a tratar de convencer a la compañía para que estableciera una sede en Nueva York. Amazon ha reconocido la labor de ambos en su comunicado: «Estamos profundamente agradecidos al gobernador Cuomo, al alcalde De Blasio y sus equipos, que tan entusiasta y amablemente nos invitaron a construir en Nueva York y nos apoyaron durante el proceso. El gobernador Cuomo y el alcalde De Blasio han trabajado incansablemente por los neoyorkinos para promover la inversión local y la creación de empleo».