Archivada la querella de Juana Rivas contra su expareja por la "sinrazón de la misma"
El auto concluye que los menores nacieron en Granada y tienen nacionalidad española, pero son hijos de padre italiano y residen en Italia
El Juzgado de Instrucción 9 de Granada ha ordenado que se suspendan de las actuaciones abiertas a raíz de la querella de Juana Rivas contra su expareja Francesco Arcuri, a quien acusó de haber presentado documentos falsos para demostrar que los dos hijos menores de ambos tenían nacionalidad italiana.
La querella de Rivas sostenía que Arcuri utilizó tal documentación para demostrar la nacionalidad italiana de los menores para que le fueran devueltos y regresaran al domicilio paterno en Italia, a pesar de que estos nacieron en España y son españoles.
Según recoge en un auto, al que ha tenido acceso Efe y contra el que cabe recurso, la jueza Rosa María Ginel ha considerado que los hechos que motivaron las actuaciones «no han sido acreditados» por lo que procede decretar el sobreseimiento libre de las mismas.
El juzgado recuerda que, una vez admitida a trámite la querella, se practicaron las diligencias necesarias para la comprobación de lo denunciado y resultó que, ciertamente, los menores nacieron en Granada y tienen nacionalidad española, pero que son hijos de padre italiano y residen en Italia.
La jueza afirma que la demanda en un Juzgado de Familia de Granada que pedía la devolución de los menores a su residencia en Italia fue presentada por la Abogacía del Estado español a requerimiento del italiano, y no por Arcuri, que instó, conforme al convenio de La Haya aplicable, del gobierno italiano que se tramitara la devolución de los niños al país de su residencia. Para ello, añade, aportó la documentación precisa ante el gobierno italiano, «sin que se detectara falsedad alguna».
Además, en ningún momento se ha discutido ni negado que los niños nacieran en España y sean españoles, «lo que sucede es que tienen su residencia en Italia y son también italianos al ser hijos de padre italiano», recoge el auto, que explica que tanto Arcuri como Rivas firmaron la solicitud de carta de identidad de los menores en mayo de 2016 para que éstos, residentes en Italia, pudieran viajar al extranjero.
Asimismo la jueza, una vez analizadas las actuaciones y vista «la sinrazón de las mismas», se pregunta incluso si existe «algún interés en Juana Rivas de mantener algún procedimiento penal en trámite contra Francesco Arcuri».
Rivas fue condenada a cinco años de cárcel por dos delitos de sustracción de menores tras estar un mes desaparecida con sus dos hijos para no entregarlos al padre. Esta madre, que ha denunciado en reiteradas ocasiones a su expareja, recurrió su condena ante el Tribunal Supremo y ha seguido también la vía judicial en Italia, donde pidió medidas cautelares contra su expareja por un supuesto maltrato a los menores.