'Microsoft Flight Simulator 24': del grito en el cielo al éxito total en dos días
La última entrega del mejor simulador de aviación del mercado llega con numerosas e interesantes novedades
Imagen promocional del 'Microsoft Flight Simulator 24'. | Xbox Game Studios
Esta esperada nueva entrega de Microsoft Flight Simulator (MFS) se puede descargar en un breve tiempo debido a su reducido tamaño de ocupación en el disco duro: 11,8GB el juego base. Lo más importante sería la nube para poder instalar los archivos necesarios de cada uno de sus modos de juego. En el momento en el que se abrió la posibilidad de descarga, justo el día de su estreno, tanto la prensa como los jugadores que habían adquirido el título —así como los suscriptores de gamepass que podían disponer de él de forma gratuita— fueron tantos que se bloquearon los servidores, para sorpresa de la compañía.
Afortunadamente, el problema se subsanó al día siguiente, y ya se pudo disfrutar con total fluidez del simulador de vuelo número uno del mercado, una nueva entrega que sin duda marcará, para bien, un antes y un después de la franquicia. Los críticos habituales que solo buscan fallos pasaron en veinticuatro horas del cabreo monumental a mostrar sus videos de vuelo e incluso sus propias viviendas capturadas con imágenes del juego.
Lo primero que sorprende son las enormes posibilidades que el juego contiene gracias a sus nuevos modos. Dispone de una cantidad extraordinaria de información para trabajar: meteorología en tiempo real, mapas cartográficos de todo el mundo, tráfico en tiempo real, un gran número de localizaciones que se han recreado al milímetro, ciclos de día y noche conforme a la realidad… Tantos recursos que se hace necesario disponer de una buena conexión de fibra óptica para poder disfrutar del juego en su totalidad.
Flight Simulator es una franquicia de reconocido prestigio, no solo entre los aficionados a los videojuegos sino también entre los profesionales de la aviación. No es sencillo poner en marcha un Boeing 747, solicitar pista a la torre de control y hacerlo despegar, menos aún efectuar la maniobra de aproximación para realizar el aterrizaje y enfrentarnos a las duras rachas de viento para intentar posar el aparato de la manera más suave en la pista. Esos conceptos son los que han enamorado a los fans a lo largo de los años. Aficionados que en muchos casos han instalado en sus casas verdaderas cabinas de pilotaje para disfrutar la experiencia de la manera más realista posible.
Después de cuatro años desde su última entrega, MFS ha multiplicado las posibilidades con sorpresas que nadie podía intuir, como crear nuestro piloto. También podemos bajar de la avioneta o del helicóptero y dar un paseo por los alrededores de la zona de aterrizaje, disponer de un modo fotografía que incluye misiones de exploración de territorios del mundo en busca de animales salvajes de la zona para posteriormente aterrizar y pie en tierra, fotografiarlos cumpliendo requisitos como un primer plano o el sol al fondo.
Cada apartado del modo fotografía se divide en colecciones como la de animales del mundo, que posee numerosas misiones: encontrar los canguros en Australia, elefantes o jirafas en África, buscar al mono narigudo, al alce, al ciervo, al lobo, al camello, al tigre, al leopardo de las nieves, y al oso polar, entre otros. En otro coleccionable debemos fotografiar grandes monumentos como la torre Eiffel, el puente de Brooklyn y un largo etcétera. Además, podremos enfrentarnos a misiones de rescate, extinción de incendios u operaciones de urgencia médica.
Sentarse a bordo de un avión comercial y percatarse de que vamos acompañados de un copiloto es una absoluta novedad junto a la ingente cantidad de posibilidades que el juego contiene: un modo carrera para empezar el aprendizaje como nuevo piloto, carreras aéreas con otros jugadores, entrenamiento de vuelo, desafíos de aterrizaje, carreras con aviones acrobáticos de Red Bull, vuelos libres, una liga de desafíos semanales para intentar situar nuestros vuelos en una buena posición de la lista de clasificación mundial y un mercado en el que conseguir nuevos aviones, helicópteros, globos o dirigibles.
Para empezar, contamos con hasta 27 naves con las que lanzarnos a los cielos, importantes líneas aéreas comerciales y diversos colores seleccionables para cada una de ellas. Y para rizar el rizo, lo increíble de las imágenes, con unos gráficos apabullantes en los que podemos ver cómo se mueve el agua bajo la influencia de las hélices de un helicóptero, las físicas reales en los movimientos de los aviones cuando pasan por una zona de viento que transmite turbulencias o la vibración del mando al introducirnos en una zona de nubes. En una palabra, MFS24 es una «exageración» con la que cualquier aficionado tendrá años de juego sin aburrimiento y lo de su lanzamiento, una mera anécdota.
Microsoft Flight Simulator 24 está disponible para Xbox series, PC, y es gratuito con la suscripción a gamepass.
